El exministro de Defensa afirma que Gallardón, Ibarra y Moratinos pueden confirmar su versión sobre lo ocurrido en 2005 en una cena en la embajada de Portugal. El artículo que José Bono publicó hace unos días en El País, en el que criticaba la actitud de Pasqual Maragall y de los independentistas catalanes, ha despertado más de una crítica, pero el exministro de Defensa no se ha quedado callado. Hoy mismo ha aprovechado una intervención en el programa ‘Al Rojo Vivo’ de laSexta para reafirmarse en su versión de lo ocurrido en una cena en la embajada de Portugal en 2005. Asimismo, ha dicho que consultó a Gallardón, Ibarra y Moratinos, presentes en el acto, y que ellos también recordaban que la conversación transcurrió tal y como él lo ha narrado.
Bono relata en el citado artículo cómo aprovechó una cena en la embajada de Portugal para reprochar al por entonces presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, su deriva hacia posturas nacionalistas con la reforma del Estatuto. El exministro ha explicado en laSexta que en aquella discusión criticó la postura del socialista catalán por haber hecho “un planteamiento contrario a la unidad”, y le advirtió que su postura no llevaba más que al secesionismo.
Desde entonces, en su opinión, el PSC no ha ido más que a peor, ya que “algunos dirigentes se han ido y otros han pasado a posiciones más radicales”, y en votos tampoco van bien, ya que “en las últimas elecciones hemos tenido un 13,8%”. Según Bono, “esto, desde mi punto de vista, es malo”, sobre todo “porque en Cataluña hay más gente dispuesta a votar planteamientos solidarios que independentistas”.
Así se ha defendido frente a las críticas que ha vertido, entre otros, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, quien ha dicho que el artículo de Bono es una “barbaridad” porque en la fecha relatada Maragall no era independentista. Sin embargo, el exministro de Defensa ha relatado que ya se esperaba que le pudieran llamar “mentiroso” por lo que ha escrito, por lo que decidió confirmar su versión con algunos de los presentes en la discusión, para comprobar si recordaban lo mismo que él.
“Doy fe de que eso fue así”, ha dicho Bono, que ha explicado que “antes de publicar el artículo consulté a Gallardón, Ibarra y Moratinos si lo recordaban”, y le dijeron que así ocurrió palabra por palabra, por lo que “lo que luego haya ocurrido que lo juzguen los ciudadanos”.
Y ha dicho que “respecto al Estatuto y al recurso del Constitucional, contaré más cosas en mi libro”, Diario de un ministro, que Planeta publicará el próximo año. “Yo soy socialista, de los míos, pero digo la verdad”, ha mantenido Bono, que ha remarcado que “aquello ocurrió” y que a pesar de que “no juzgo las intenciones”, entonces “percibimos que Pujol y Maragall defendían cosas similares”.
Según ha dicho el socialista, “se ha creado un sentimiento colectivo de agravio y muchos catalanes piensan de verdad que España les roba”, por lo que propone que para solucionar esta situación hay que “entenderse y hablar”, y también “poner de manifiesto que juntos podemos más que separados”.
“Esto tienen que hacerlo el PSOE y el PP”, y “es más importante que Cataluña no sea un estado independiente que el hecho de quién gane las próximas elecciones. Si sólo nos preocupamos por eso último, Cataluña irá por un camino inadecuado”, ha aseverado el exministro de Defensa.
Alcaldía de Madrid
Por otro lado, al ser preguntado si sería candidato al Ayuntamiento de Madrid si se lo piden en el PSOE, tras el anuncio de hoy mismo de Jaime Lissavetzky de que no se presentará a las primarias, Bono ha contestado que “rotundamente no”.
“Zapatero me insistió de manera clara para que fuera candidato a la Alcaldía de Madrid”, pero dijo que no, y ahora, tras la renuncia de Lissavetzky, ha decidido apoyar al otro candidato que suena con fuerza para liderar la papeleta socialista al Ayuntamiento de la capital. “Estoy cerca de Antonio Miguel Carmona y espero que se convierta en alcalde de Madrid”, ha sentenciado.
