Bajo el lema “Ni mina ni Altri, defendemos nuestro modo de vida”, la concentración ha llenado las calles de A Pobra y su bahía de barcos bateeiros, convertidos en símbolo de la defensa del entorno costero y del empleo tradicional. La protesta coincide con el Día Mundial del Agua, lo que ha reforzado la denuncia de una comunidad que ve amenazada su principal fuente de riqueza: la Ría de Arousa.
UNA MOVILIZACIÓN POR TIERRA Y MAR
La manifestación partió desde la estación de autobuses de A Pobra, recorriendo la calle Anxo Rei Ballesteros hasta desembocar en el aparcamiento junto al club náutico. La intensa lluvia no impidió que miles de personas coreasen consignas como “Altri mata, la mina remata” o “Si tan buena es, que la hagan en Lisboa”.
Miles de paraguas y pancartas se unieron en una marea ciudadana y marítima, evidenciando la magnitud de la protesta
Entretanto, las embarcaciones atracadas en la ensenada lucían pancartas con lemas como “Por una tierra viva, Altri No” y “SOS Agua. Porque no hay una Ría de Arousa B”, en alusión a la importancia de proteger el entorno para las futuras generaciones.
EXIGENCIAS A LA XUNTA Y DIMISIONES
Durante el acto final, la presidenta de la asociación vecinal Ulloa Viva, Pilar Naveira, adelantó que, aunque “es más que probable que el proyecto tenga licencia administrativa, lo que es 100% seguro es que no tiene licencia social”. En las próximas semanas, se espera la evaluación ambiental integrada y la aprobación del proyecto industrial, momento en el que iniciarán “todas las acciones administrativas y legales posibles” para frenar esta macrocelulosa.
Por su parte, el presidente de la Plataforma en Defensa da Ría de Arousa (Pdra), Xaquín Rubido, reclamó la dimisión del conselleiro do Mar, Alfonso Villares; de la conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez; y de la conselleira de Economía e Industria, María Jesús Lorenzana. “Pensamos que la Xunta tiene que cambiar de rumbo y el presidente es el responsable”, sentenció.
UN MODELO INDUSTRIAL CUESTIONADO
El actor gallego Carlos Blanco, junto a Isabel Risco y Quico Cadaval, condujo el acto final desde el palco. “Rectificar es de sabios, están a tiempo. No pasa nada, rectificad”, pidió Blanco a la Xunta, subrayando la necesidad de buscar “una salida para nuestras rías que están muy enfermas”.
Los representantes de las plataformas consideran “indignante” que la Xunta trate como proyectos estratégicos la Mina de Touro-O Pino y la macrocelulosa en Palas de Rei, mientras “desprecia” a sectores como el marisquero y el bateeiro
La pausa para escuchar el estruendo de las sirenas de los barcos bateeiros marcó uno de los momentos más emotivos de la jornada. “No nos van a desmovilizar porque todavía hay recorrido para seguir presionando en Galicia, en España y en Europa”, afirmaron los portavoces antes de concluir la protesta.