La reinvención de las grandes constructoras españolas ha convencido al mercado bursátil en los últimos seis meses. Tal es así, que la mayoría de cotizadas del sector del ladrillo ha logrado doblar su valor en Bolsa. Los analistas consultados por EL BOLETIN explican que la fuerte diversificación de estas compañías, los signos de recuperación económica y la apertura del mercado crediticio han conseguido revertir la visión de un sector que ha actuado como el principal lastre de la Bolsa española en los últimos dos años.
Los expertos recuerdan que en la actualidad la mayoría de constructoras españolas han reducido sustancialmente su exposición constructora e inmobiliaria. “Ahora mismo, son de todo menos constructoras”, puntualizan los analistas.
Tal es así que un estudio demuestra que la exposición del Ebitda del sector a la construcción y al área inmobiliaria en España será del 13% en 2010. La gestión de aeropuertos y el ámbito de las concesiones se han convertido ahora en la apuesta de estas compañías.
Además, detallan los analistas consultados, el fuerte endeudamiento financiero que pesaba de manera notable sobre sus cotizaciones se ha visto aliviado gracias a la apertura del mercado crediticio.
Las casas de análisis también han contribuido al resurgir de las grandes constructoras en Bolsa. Firmas especializadas como Deutsche Bank, UBS, Goldman Sachs y Cheuvreux han revisado al alza en los últimos días sus recomendaciones sobre el sector del ladrillo.
En este sentido, los expertos de Goldman Sachs han mejorado el consejo sobre las constructoras europeas hasta neutral desde infraponderar. Asimismo, los analistas del banco estadounidense han aumentado sus previsiones de Ebitda para los dos próximos años en una media del 16%.
El proceso de fusión entre Cintra y Ferrovial ha apoyado en los últimos meses las cotizaciones de ambas compañías en vistas de fijar el canje de títulos. Según lo acordado, la unión se materializará a finales de año mediante el intercambio de cuatro títulos de Cintra por cada acción del grupo constructor.
Ferrovial sufrió a principios de año un fuerte castigo en Bolsa como consecuencia del riesgo asumido en BAA, su filial británica de aeropuertos.
