Los bancos españoles volvieron a impulsar en el mes de junio las compras de deuda española, ayudando a estabilizar la prima de riesgo, que se mantiene más o menos estable en el entorno de los 300 puntos, menos de la mitad de los 638 enteros que llegaron a alcanzarse en 2012.
Tal y como muestran las estadísticas de deuda del Estado, al mes de junio (últimas cifras conocidas), las entidades de crédito españolas tenían en sus carteras deuda registrada por valor de 224.378 millones de euros, un 33,7% del total en circulación y un nuevo récord histórico. La cifra representa además un incremento de más de un 8,2% respecto a los 207.300 millones a mayo. Si se tienen en cuenta los seis primeros meses del año, el incremento es de un 14%.
Las aseguradoras, sin embargo, redujeron ligeramente sus carteras de deuda pública en junio en un 0,5%, al pasar de 42.243 millones de euros a 42.045 millones. A pesar de ello, en los primeros seis meses del año se registra un incremento de un 9,8%.
También redujeron sus exposiciones a la deuda soberana española los inversores extranjeros, que a junio tenían en sus manos 240.029 millones de euros, un 36,15% del total en circulación. Respecto a las cifras de mayo, los no residentes redujeron su exposición en un 1%, si bien en la primera mitad del año la aumentaron en un 6,8%.
La prima de riesgo española, medida por el diferencial entre la rentabilidad del bono español a diez años y la de su homólogo alemán, se situaba hoy a media mañana en 296 puntos, una subida del 0,10% respecto a la jornada anterior. En concreto, el bono de referencia ofrecía en el mercado secundario un rendimiento del 4,644%, mientras que el bund pagaba a la misma hora un 1,68%.
El diferencial tocó sus máximos en el verano de 2012, cuando llegó a alcanzar los 638 puntos entre insistentes rumores de que el rescate a España era inminente.
