Gestamp fija su debut en Bolsa para el año 2017

La familia Riberas contempla la venta de acciones de Gestamp representativas de entre un 25% y un 37% de su capital social, mientras que Mitsui aboga por la permanencia. Gestamp se estrenará como cotizada el próximo año. La familia propietaria del grupo industrial ha mostrado su intención de vender un paquete minoritario del capital social que podría estar entre el 25% y el 37% de sus acciones con el objetivo de seguir favoreciendo el crecimiento de la compañía de componentes automovilísticos.
 
El presidente de Gestamp, Francisco Riberas, ha explicado la salida a Bolsa como un “paso natural” para la compañía a consecuencia del “crecimiento experimentado los últimos años”, según declaraciones recogidas por Expansión. La firma cerró el ejercicio pasado con una facturación de 7.035 millones de euros que suponen el doble de ingresos que al comienzo de esta década.
 
Los accionistas de control, los hermanos Francisco y Jon Riberas, se quieren asegurar el control accionarial con el objetivo de que el estreno como cotizada sirva para “consolidar e institucionalizar todo el trabajo” de los últimos años pero siempre “sin perder el carácter familiar” de una compañía que emplea a 34.000 personas.
 
De momento, el tanteo de la operación estaría en estadios muy iniciales, por lo que no se habría fijado ni el porcentaje definitivo de colocación ni tan siquiera se habría designado al grupo de bancos e instituciones encargadas de mover el libro de ventas de las acciones del grupo. En cualquier caso, según han adelantado sus actuales socios de referencia, la japonesa Mitsui no venderá ninguna de las acciones adquiridas el pasado septiembre y que le otorgaron la titularidad de un 12,5% de la compañía.
 
El principal impedimento para que estos planes puedan llegar a término se encuentra en “las condiciones del mercado”. En lo que va de este año, son ya varias las operaciones previstas en Bolsa española y otras plazas de negociación que se han suspendido o pospuesto a consecuencia de la fuerte volatilidad reinante.
 
Los 416 millones de euros desembolsados por los asiáticos por su paquete en la española otorgan a esta última una valoración de 3.328 millones, lo que situaría a la compañía al nivel de cotizadas como Ebro Foods, FCC y Mediaset España en cuanto a capitalización bursátil.