La amnistía fiscal del año 2012 y el mantenimiento de una tributación al 1% ha potenciado un año más el desarrollo de estos vehículos de inversión frecuentados por las grandes fortunas. La recuperación se va dejando sentir con distinta fuerza en las diferentes ramas de la economía. Y las grandes fortunas españolas de inversión se sitúan al frente de la remontada en este último año. Las cifras anuales de las sociedades de inversión de capital variable, más conocidas por las siglas de sicav, alcanzan récords históricos.
El balance anual del mercado de valores español recoge sin rodeos que las sicav “atraviesan el mejor año desde que comenzó la crisis”. Una afirmación que se justifica en las cifras de nueva creación, ampliaciones de capital y capitalización alcanzadas a cierre del pasado mes de noviembre, últimas cifras oficiales disponibles mediante las que la sociedad rectora de la Bolsa española ha compuesto su Informe de Mercado 2015.
A lo largo de los tres últimos años, el número de sicavs de nueva creación ha sido siempre superior al precedente. Hasta el decimoprimer mes del año, se habían registrado un total de 126 de estas sociedades que los grandes patrimonios españoles acostumbran a emplear para mantener activa su fortuna y aprovecharse de las ventajas fiscales que esta figura corporativa otorga frente a otros métodos.
Con este ritmo de expansión, son ya 3.357 las sociedades de este tipo admitidas a negociación en el mercado español. Un registro que desde BME se califica como “máximo histórico”. Y es que, en estos tres últimos años, siempre se han creado más de 100 sicavs por ejercicio.
Esta proliferación y el incremento en la cotización de múltiples activos de inversión, la capitalización conjunta de estas sociedades de inversión ha ascendido hasta otro nuevo récord reciente: 38.000 millones de euros. Este valor de mercado supera en 14.000 millones la cota mínima registrada por las sicavs hace precisamente 36 meses. A este auge ha contribuido también la poco frecuente cifra de 25 ampliaciones de capital por un importe cercano a 1.100 millones de euros.
El patrimonio gestionado por las sicavs se ha visto incrementado a lo largo de este último año un 11%, hasta alcanzar los 35.062 millones de euros. Así se entiende que también haya crecido el número de ellas que ha repartido dividendo, hasta 25 han retribuido a sus accionistas. En este sentido, el número total de participantes también ha crecido, pues al cierre del pasado mes de noviembre se alcanzaban ya los 465.940 accionistas.
Desde la sociedad rectora de la Bolsa española afirman que la razón para esta remontada se encuentra en que ha resurgido “el interés de los grandes patrimonios de canalizar sus recursos” en un momento en que otras opciones resultan menos atractivas. En este sentido, los expertos destacan “la flexibilidad de la que disponen las sicavs a la hora de invertir”. Además, el informe subraya otros factores como la amnistía fiscal del Ministerio de Hacienda en 2012, que “ha permitido aflorar capitales con los que han sido beneficiadas”. Igualmente, el mensaje de “tranquilidad” del Gobierno aseverando que estos instrumentos seguirán tributando al 1% en el Impuesto de Sociedades.
En cuanto a la composición de su cartera patrimonial, la inversión en valores negociados en la Bolsa española ha sido un activo clave para estas sociedades. El 30% de su cartera está en el mercado de valores español, incluyendo en esta cifra tanto la inversión en deuda pública como en renta variable, según los datos más recientes publicados por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
