“Tenemos cierta capacidad para hacer las cosas bien en este sentido”, se ha limitado a señalar el consejero delegado. El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha destacado que la entidad mantendrá el próximo año el pago de dividendo en efectivo. Durante la rueda de prensa posterior a la presentación de resultados hasta septiembre, no ha querido entrar en detalles sobre si se elevará el payout del 27% de este año, si bien ha dado a entender que el desembolso será similar o incluso superior al último.
“Tenemos cierta capacidad para hacer las cosas bien en este sentido”, se ha limitado a señalar en ese sentido, si bien ha confirmado que “el dividendo que estamos descontando es de un 27%, en el entorno de los 200 millones”, ya que BCE “pide que se vaya deduciendo trimestre a trimestre el dividendo en proforma”.
Bankia desembolsó el pasado mes de julio un dividendo de 1,75 céntimos de euro brutos por acción en efectivo, lo que supuso una retribución total a los accionistas de 202 millones de euros. El Estado, a través de BFA (primer accionista de la entidad con una participación que supera el 63%), percibió alrededor de 128 millones.
El banco que preside José Ignacio Goirigolzarri, que ha cumplido con antelación los objetivos del plan estratégico que se fijó cuando el nuevo equipo ejecutivo tomó los mandos, se encuentra ya trabajado en el nuevo plan para los próximos tres años, que tendrá de nuevo unos “objetivos ambiciosos”. Aunque Sevilla ha descartado adelantar detalles, sí ha reconocido que en la estrategia futura influirá el escenario de bajos tipos de interés, que será “prolongado en el tiempo”.
