El Ibex 35 regresa del puente con ánimos renovados y roza los 11.500 puntos

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El Ibex 35 regresa del puente con ánimos renovados y roza los 11.500 puntos

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La prima de riesgo española retrocedía hasta los 109,30 puntos, con el bono español de deuda a diez años ofreciendo una rentabilidad de un 1,508%. A pesar de una apertura bajista, las principales bolsas europeas (el mercado de Londres permanece cerrado por festivo) logran darse la vuelta a media sesión. Los inversores apuestan por los avances tras el dato mejor de lo esperado de PMI manufacturero de la eurozona, que se situó en 52 puntos en abril, mientras continua el goteo de informaciones sobre la negociación de Grecia con sus socios europeos.

En España, el Ibex 35 lograba acercarse a los 11.500 puntos, con una subida de un 0,93% hasta los 11.491 enteros en su regreso del puente de mayo. Al frente del selectivo madrileño se situaba IAG, cuyas acciones se disparaban un 5,71% ante las informaciones que apuntan a que se despeja el camino de la OPA presentada por la irlandesa Aer Lingus.

Fuera de nuestras fronteras, el Eurostoxx 50, principal indicador del Viejo Continente, subía un 0,83% hasta alcanzar los 3.645 puntos, mientras que al otro lado del Atlántico los futuros de Wall Street apuntaban a una apertura alcista. El Dow Jones subía un 0,3% en la preapertura, por el 0,1% que subía el tecnológico Nasdaq.

En los mercados de renta fija reinaba la tranquilidad, con la prima de riesgo española retrocediendo un 2,76% hasta los 109,30 puntos. En concreto, el bono español de deuda a diez años ofrecía una rentabilidad en el mercado secundario de un 1,508%, frente al 0,415% que pagaba a la misma hora el bund germano.

En lo que se refiere al resto de países de la denominada periferia europea, la prima de riesgo griega se situaba en 1.027,10 puntos, mientras que el diferencial entre Italia y Alemania se colocaba en 111,50 enteros. La prima de riesgo irlandesa era de 54,70 puntos, y la de Portugal de 172,20.

El tipo de cambio del euro frente al dólar se situaba en 1,1137 dólares por cada moneda comunitaria. La divisa europea se cambiaba por 133,896 yenes.

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