La sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea sobre la ley hipotecaria española ha centrado las tertulias radiofónicas de la mañana. En la Cadena SER, Mariola Urrea señaló que el Estado está obligado a asumir la sentencia y cumplirla desde ya y por tanto “desde mañana cualquier juez debería poder suspender cualquier procedimiento de ejecución inmobiliaria”.
Para Lluís Basset, en la misma emisora, el fallo “es alentador y demuestra que realmente el motor de la construcción europea es precisamente el tribunal de Luxemburgo. Si no se ha cumplido la directiva en España, es culpa de las instituciones en España, pero hay una institución que ha construido Europa sobre el derecho, y es como un cuento moralizante”.
Urrea se mostró de acuerdo e insistió en que el Tribunal de Justicia de la UE es “la que más ha trabajado en el momento de integración, y en esta etapa, ampara jurisdiccionalmente al ciudadano”.
Miguel Ors explicó que la sentencia supone “un cambio en el procedimiento” y apuntó que “si ya se está en la fase de ejecución, (el consumidor) no puede hacer nada aunque alegue que hay una cláusula abusiva”. Y añadió que “en caso de morosidad (seis meses sin pago de hipoteca), se inicia en el banco un proceso de negociación para llegar a algún tipo de acuerdo, por lo que se ejecutan menos lanzamientos (desahucios) de los que parece. A los bancos les interesa más el alquiler, incluso social, que quedarse con un piso y sus pagos”.
En la COPE, Jesús Cacho opinó que “hemos aprendido a base de palos, no se puede firmar cualquier cosa”. Y consideró que este cambio ha traído demasiado entusiasmo, advirtiendo que “hasta mayo no se notarán cambios significativos y se mirará caso por caso”. Por su parte, Bieito Rubido señaló que los notarios “deberían haber advertido de lo que se firmaba”.
