Empezamos por las graves acusaciones a Cristóbal Montoro que pueden leerse en elplural.com, diario al que le cuentan que el sábado 7 de julio, el ministro de Hacienda llamó a “un diputado de gran influencia y mucha historia en el PSOE” y asegura que “fuera de sí, en un tono de enorme enfado, comenzó protestando por los recursos que el PSOE ha planteado ante el Constitucional por algunas de las reformas del Gobierno Rajoy. La primera por la amnistía fiscal. La segunda, sólo dos días antes de la llamada, por el decretazo por el que el PP acababa con la RTVE independiente. Y la, que más preocupa, la anunciada, aunque aún no presentada, por la reforma laboral.”
Señala el digital que dirige Enric Sopena que “en medio de esos exabruptos, a Montoro se le escapó un reflejo del autoritario que, al parecer, lleva dentro: “Os vamos a quitar un 20% de las subvenciones”. Y que el diputado socialista, al otro lado de la línea telefónica, saltó ante el comentario: “¿Nos estáis amenazando?”.
Cambiando de tercio, diariocritico.com informa que tas semanas de negociaciones, en la madrugada de este jueves, se ha conseguido por fin un preacuerdo entre la dirección del PSOE y los negociadores por parte de los trabajadores. Este principio de acuerdo afecta a la plantilla de la estructura Federal del partido, a los trabajadores de los grupos socialista en Congreso y Senado, y a los de 14 estructuras territoriales: 8 partidos autonómicos y 6 provinciales.
Informa que el expediente se va a cerrar con 16 bajas «voluntarias» y 7 despidos forzosos, con una indemnización media de unos 35 días por año trabajado. Además, el acuerdo introduce la prejubilación de 100 trabajadores a partir de los 58 años, que se acogerán a un programa de garantía de rentas, que en función de su retribución anual percibirán entre un 68 % y un 74 % de su salario actual. Así mismo, se ha conseguido la recolocación de 21 trabajadores.
