Los españoles comienzan a volver de vacaciones, bueno menos

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Los españoles comienzan a volver de vacaciones, bueno menos

Los españoles comienzan a volver de vacaciones, bueno menos Troitiño que ni está ni se le espera, lo que continúa indignando especialmente a algunos diarios como Abc, que hoy abre su portada con las declaraciones del presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti: “Si no se puede vigilar a Troitiño, para qué está el CNI?”. Mientras alguien del servicio secreto se lo explica al de Vocento y al político popular, podemos entretenernos con las encuestas propias de los lunes, que en esta ocasión son dispares ¡qué ya está bien de aburridos sondeos monocordes!.

El caso es que El Mundo y La Razón llevan dos encuestas favorables al PP en todos sus feudos pero con una discrepancia: la comunidad valenciana. Resulta que Pedrojota dice que “Camps no recoge el ‘fervor’ electoral del PP” -como se nota que acaba de finalizar la Semana Santa, lo digo por lo del fervor- y apunta El Mundo que es el único presidente popular que suspende, mientras que al diario que dirige Marhuenda le sale que “Francisco Camps mejora sus resultados, pese al acoso mediático y político al que está sometido”. Cómo la parrala.
Público también está por la labor de que los datos no cuadren ya que mientras La Razón asegura que el PP aventajaría al PSOE en 14,5 puntos si se celebrasen hoy las elecciones generales, al rotativo progresista el sondeo le da como resultado que los socialistas han recortado 11 puntos su desventaja, por lo que se quedarían sólo 2,3 puntos por detrás de los de Rajoy, tras la decisión de Zapatero de no presentarse como candidato a las generales de 2012.

Dejamos los sondeos pero no la Semana Santa, ya que El País se ha tomado su tiempo pero se decide a editorializar sobre la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Madrid de prohibir la llamada procesión atea. Califica la sentencia de “confesional” por considerar que se basa “en juicios de valor y daños indemostrables” y dice que “es un recorte inexplicado, e inexplicable en un Estado aconfesional, de la libertad de expresión” y del derecho de reunión.

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