La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en una visita a una farmacia.
La Comunidad de Madrid ha recriminado al Ministerio de Sanidad que no haya respondido a su plan para hacer test de antígenos en las farmacias de la región, algo a lo que se oponen algunos colectivos y profesionales sanitarios. “Ha pasado una semana y estamos perdiendo el tiempo para intentar aumentar el cribado”, ha afirmado el viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19, Antonio Zapatero.
“Hoy va a hacer una semana que enviamos al ministerio nuestro documento”, ha recordado Zapatero este viernes en una rueda de prensa junto a Elena Andradas, directora general de Salud Pública, para informar de nuevas medidas para evitar las aglomeraciones. Entre ellas, la prohibición de actos de celebración de las campanadas en la calle, lo que se traduce en que este año no se podrán tomar las uvas en la Puerta del Sol.
El viceconsejero ha destacado la importancia de contar con la aprobación del departamento de Salvador Illa para poner ya en marcha su plan, ya que considera que “estamos perdiendo el tiempo”. “Nos urge que tengamos una respuesta sobre este tema”, ha sostenido Antonio Zapatero, que ha remarcado que tanto la Consejería de Sanidad como la Comunidad están “pendientes” de que el ministerio les diga algo.
Según la propuesta que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso trasladó a Illa, cualquier ciudadano podría acudir a una oficina de farmacia y someterse a esta prueba. Eso sí, siempre y cuando no presente síntomas, tal y como explicó el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, el pasado viernes.
“No podemos permitimos el lujo de no sumar a farmacias en la lucha contra el covid”, defendió Escudero, que mostró su deseo de contar cuanto antes con la aprobación del Gobierno. La participación en esta campaña de test será voluntaria y únicamente los farmacéuticos acreditados por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid podrán realizarlos. Eso sí, para ello antes deberán obtener la acreditación tras superar un curso de actualización de conocimientos en coordinación con la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria.
Según el municipio donde se encuentre y de su infraestructura, la farmacia se podrá acoger a uno de los dos modelos diseñados para realizar pruebas, informó la Comunidad, que remarcó que aquellas que las realicen durante su horario de apertura deberán disponer de un circuito de acceso a la zona acotada donde se realice la prueba. Por su parte, las que opten por realizar las pruebas tras el cierre al público, facilitarán el horario específico para tal fin.
En todas ellas habrá una zona específica para realizar las pruebas, que se desinfectará después de cada una y deberá disponer de ventilación natural o mecánica. Además, en una zona previa a ese espacio, tendrán que tener un punto de información para la entrega de documentación, información sanitaria y recomendaciones higiénico-sanitarias. Si un ciudadano da positivo, la oficina de la farmacia deberá notificarlo inmediatamente.
Las previsiones de la a Comunidad de Madrid es que cerca de 500 farmacias se sumen de manera voluntaria a esta iniciativa.
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