En este comportamiento destacaron las subidas de los precios de la alimentación y, en menor medida, los carburantes y lubricantes para vehículos personales, frente a los descensos registrados en noviembre del año pasado, apunta la agencia estadística.
Asimismo, aunque en sentido contrario, influyó bajada de los precios de la electricidad.
Por su parte, la tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumentó tres décimas hasta el 1,7%, con lo que se sitúa casi cuatro puntos por debajo de la del IPC general.
Los precios de consumo registran en noviembre una tasa del 0,4% respecto al mes de octubre, según el indicador adelantado del IPC.