Blackstone denomina “sorpresa” un acontecimiento al que un inversor profesional asignaría una probabilidad de uno sobre tres de que ocurra, pero la firma considera más probable. En concreto, que tiene más del 50% de posibilidades de producirse. La lista, que ha sido realizada por Byron Wien, vicepresidente de Private Wealth Solutions, y Joe Zidle, jefe de estrategias de inversión, contiene un total de diez eventos.
La primera de las sorpresas supone el fin del rally de Wall Street. “La combinación de fuertes beneficios choca con la subida de los tipos de interés, lo que hace que el S&P 500 no avance en 2022”, señala Blackstone. “El ‘valor’ supera al ‘crecimiento’. Continúa la alta volatilidad y se produce una corrección que se acerca, pero no supera, el 20%”.
Otro de los augurios es que la inflación no será tan transitoria como se desea. “Mientras los precios de algunas materias primas bajan, los salarios y los alquileres siguen subiendo y el IPC y otras medidas de inflación ampliamente seguidas aumentan un 4,5% en el año. Los descensos de los precios del transporte y la energía animan a los defensores acérrimos de la opinión de que la inflación es ‘transitoria’, pero la inflación persistente se convierte en el tema dominante”.
Mientras, el mercado de bonos “comienza a responder al aumento de la inflación y al tapering de la Reserva Federal, y el rendimiento del Tesoro a 10 años sube al 2,75%. La Fed completa su tapering y sube los tipos cuatro veces en 2022”.
A pesar de la variante de Ómicron, “las reuniones de grupos y convenciones vuelven a los niveles prepandémicos a finales de año”. “Mientras que el Covid sigue siendo un problema tanto en el mundo desarrollado como en el menos desarrollado, las condiciones normales se restablecen en gran medida en EEUU. La gente pasa de tres a cuatro días a la semana en las oficinas y vuelve en masa a los teatros, conciertos y estadios deportivos”, señala Blackstone.
Los responsables políticos chinos responden a las recientes turbulencias en los mercados inmobiliarios del país “frenando la inversión especulativa en vivienda. Como resultado, hay más capital de los hogares chinos que necesita ser invertido. Comienza a florecer una importante industria de gestión de activos en China, creando oportunidades para las empresas occidentales”.
En los mercados de materias primas, el precio del oro “sube un 20% hasta alcanzar un nuevo récord. A pesar del fuerte crecimiento en EEUU, los inversores buscan la seguridad percibida y la protección contra la inflación del oro en medio de la subida de precios y la volatilidad”, creen los expertos del fondo estadounidense. “El oro reclama su título de refugio para los multimillonarios recién acuñados, incluso cuando las criptodivisas siguen ganando cuota de mercado”.
“Mientras los principales países productores de petróleo llegan a la conclusión de que los altos precios del petróleo están acelerando la implementación de programas de energía alternativa y permitiendo que los productores de esquisto de EEUU vuelvan a ser rentables, estos países no pueden aumentar la producción lo suficiente como para satisfacer la demanda. El precio del crudo West Texas confunde las curvas a plazo y las previsiones de los analistas cuando supera los 100 dólares por barril”.
De repente, “la alternativa nuclear para la generación de energía entra en escena”. “Se han desarrollado suficientes medidas de seguridad para reducir los temores sobre sus peligros, y la viabilidad de la energía nuclear es ampliamente reconocida. Se aprueba el desarrollo de un gran emplazamiento nuclear en el Medio Oeste de EEUU. La tecnología de fusión surge como una posible fuente de energía futura”.
La ESG “evoluciona más allá de las declaraciones políticas de las empresas. Los organismos gubernamentales elaboran y aplican nuevas normas reguladoras que exigen a las empresas cotizadas de EEUU la publicación de información que documente los avances en diversas métricas consideradas fundamentales en la nueva era”. “Los gobernadores de la Reserva Federal encabezan la aplicación de pruebas de resistencia para evaluar la vulnerabilidad de las instituciones financieras a los escenarios del cambio climático”.
Sin embargo, en un revés para su programa de energía verde, “EEUU se encuentra con que no puede comprar suficientes baterías de litio para alimentar los vehículos eléctricos que tiene previsto producir”. “China controla el mercado del litio, así como el del cobalto y el níquel utilizados en la fabricación de las barras de transmisión, y opta por reservar la mayor parte del suministro de estas materias primas para uso interno”.
