El beneficio de Bank of America se desplomó un 50% en el cuarto trimestre del año hasta los 2.079 millones de dólares después de que la reforma fiscal impulsada por Donald Trump en EEUU tuviese un impacto de 2.900 millones en el gigante bancario.
Los ingresos aumentaron un 22,2% hasta alcanzar los 20.436 millones de dólares, mientras que la entidad aumentó las provisiones por pérdida de crédito un 29% hasta los 1.001 millones.
El banco ha anunciado que, excluyendo el impacto de la reforma fiscal, sus beneficios ajustados por acción ascendieron a 47 centavos, frente a los 44 centavos que había augurado el mercado. Los ingresos ajustados, sin embargo se situaron en 21.400 millones, frente a las expectativas de 21.531 millones.
En el conjunto del ejercicio, la entidad estadounidense obtuvo un beneficio neto atribuido de 16.618 millones de dólares, un 3% más que en el año fiscal 2016, mientras que sus ingresos ascendieron a 44.667 millones de dólares, un 8,7% más. El consejero delegado de Bank of America, Brian Moynihan, ha explicado en un comunicado que los resultados de 2017 reflejan “la solidez” de la entidad.
Las acciones de Bank of America abrían la sesión con un retroceso de un 0,93% hasta situarse en 30,95 dólares.
