Wall Street regresa a la actividad instalado en el signo positivo tras el parón por la festividad del Día del Trabajo. Las compañías de materias primas lideran los avances, después de que el oro haya alcanzado los 1.000 dólares la onza y el petróleo haya superado de nuevo los 70 dólares el barril. Los movimientos corporativos, de la mano de Kraft Foods, son otro de los focos de la jornada.
Sin apenas referencias en el apartado macroeconómico, en la cabeza de los inversores aún resuenan los ecos de la cumbre de los ministros de Finanzas del G-20 en Londres de este fin de semana, en la que se acordó continuar por el momento con los planes de estímulo. Esta medida es uno de los factores decisivos que llevan a las materias primas a revalorizarse en el mercado, arrastrando consigo a las compañías del sector.
Los movimientos corporativos son uno de los grandes protagonistas. En el sector alimentario, Kraft Foods ha mostrado su intención de insistir en la compra de la británica Cadbury, después de que esta haya rechazado una oferta de 16.700 millones de dólares. Kraft, a la que se le podría adelantar Nestlé o Hershey, considera que la unión con Cadbury crearía un gigante que generarías unas ventas de más de 50.000 millones de dólares anuales. Los títulos de Kraft Foods ceden un 5,77% en Wall Street, mientras que en Londres las acciones de Cadbury se disparan un 40%. No es el único movimiento corporativo que protagoniza la sesión. Atheros Communications ha anunciado que adquirirá Intellon por un precio de 244 millones.
