Esta ha sido la semana clave. Los cinco gigantes estadounidenses (JP Morgan Chase, Goldman Sachs, Bank of America, Citigroup y Morgan Stanley) han presentado sus cuentas para informar sobre cómo ha ido el negocio en el segundo trimestre del año. No han sido buenas las noticias, y por eso muchos de ellos pretenden llevar a cabo nuevos recortes de plantilla.
Según ha informado la agencia Bloomberg, Morgan Stanley planea despedir a 700 trabajadores antes de que termine el año (la cifra total, en ese caso, ascendería hasta los 4.000 despidos). También Citigroup está barajando el despido de 300 personas relacionadas con su departamento de banca de inversión. Además, fuera de las fronteras de EEUU se habla del Deutsche Bank y de cómo pretende recortar 1.000 puestos de trabajo también en esa área.
Morgan Stanley informó que en el segundo trimestre del año ha obtenido un beneficio neto de 564 millones de dólares, lo que supone un 24% menos que en el segundo trimestre del año pasado. Por su parte, Citigroup, a pesar de obtener un beneficio neto de 2.946 millones de dólares, también cayó un 12% en relación a las cifras obtenidas en el mismo período del año anterior.
A otros grandes bancos no les ha ido mejor. Goldman Sachs, por ejemplo, ganó en el segundo trimestre del 2012 un 11% menos que entre los meses de abril y junio del 2011, y su beneficio neto ascendió hasta los 962 millones de dólares. Por su parte, JP Morgan Chase reportó unas ganancias de 4.960 millones de dólares a pesar del agujero –valorado en 4.400 millones de dólares- ocasionado por sus apuestas en el negocio de los productos derivados. En cualquier caso, esa cifra supone un 8,6% menos que en 2011.
La excepción pertenece a Bank of America, que en el segundo trimestre ganó 2.463 millones de dólares frente a los 8.826 millones de dólares que perdió en el segundo trimestre de 2011.
