La Bolsa de Hong Kong ha anunciado, este viernes, la compra de la Bolsa de Metales de Londres (LME, por sus siglas en inglés) tras desembolsar 1.400 millones de libras esterlinas (1.725 millones de euros). De este modo, el histórico parqué británico, de 135 años de edad, pasa a estar vinculado a la ex colonia.
El acuerdo incluye el pago de 107,60 libras por cada una de las 12,9 millones de acciones que actualmente aloja el índice LME. La operación responde a la estrategia de la Bolsa de Hong Kong de expandir su presencia en los mercados de materias primas.
Los responsables de la Bolsa de Hong Kong han anunciado que el LME aún tiene que «entender la oportunidad de crecimiento» que supone el continente asiático, y en particular China. También han dicho que el acuerdo facilitará una plataforma para el «incremento de ingresos» mientras el índice londinense se expande por la región.
Este acuerdo responde a una creciente demanda por el consumo de metales en Asia y sobre todo en el gigante asiático. Además, la Bolsa de Hong Kong aprovechará esta compra para diversificar su negocio y no depender tanto de sus valores tradicionales (equities).
