Los accionistas de NYSE Euronext están nerviosos. El acuerdo de fusión que ha pactado la Bolsa francoestadounidense con la Bolsa alemana, Deutsche Boerse, se queda a 1.600 millones de dólares (1.100 millones de euros) de la contraoferta presentada hace unos días por los mercados ICE y Nasdaq, en su conjunto. Por ese motivo, algunos de estos inversores estarían presionando al mercado teutón para que mejore su oferta.
Desde la directiva de NYSE Euronext han pedido paciencia y prudencia. Paciencia porque, dicen, el acuerdo con Deutsche Boerse reportará mayores beneficios en el medio plazo además de un dividendo especial. Y prudencia porque, de seguir presionando a Francfort, los accionistas de la francoestadounidense podrían ver una retirada alemana del acuerdo.
Si la fusión llega a buen puerto, estos dos mercados formarán la mayor plataforma bursátil del mundo, con un importante negocio relacionado con productos derivados.