Después de semanas en las que el senador expresó sus reticencias sobre la candidatura de la exsecretaria de Estado, mañana celebrarán un acto conjunto La virtual candidata demócrata a la presidencia estadounidense Hillary Clinton por fin ha logrado el apoyo de su gran rival en las primarias, el senador por Vermont, Bernie Sanders. Mañana aparecerán juntos por primera vez en un acto de campaña electoral y se espera que éste anuncie su apoyo a la exsecretaria de Estado.
En concreto, el evento tendrá lugar en la ciudad de Portsmouth, en New Hampshire, casi allí donde empezó todo con la inesperada victoria de Sanders en la segunda contienda del calendario de primarias. Desde entonces, las diferencias entre los dos candidatos se habían acrecentado de tal manera que el senador por Vermont se habia negado a retirarse de la carrera pese a que Clinton se aseguró la victoria hace ya varias semanas.
Tanto es así que pese a sus nulas opciones matemáticas de lograr la nominación en la Convención Nacional del partido, Sanders había mantenido públicamente su intención de presentar allí su candidatura. Su objetivo era el de aumentar su presión e influencia en las posiciones y políticas del partido y de la candidata para moverlas a la izquierda, pero al coste de debilitar también la fortaleza de la virtual candidata demócrata en la carrera presidencial contra el multimillonario Donald Trump, virtual nominado republicano.
Gran parte de los analistas consideraban, de esta forma, que Sanders estaba malogrando el indudabe capital político acumulado en una campaña en que ha movilizado a millones de seguidores generando un auténtico fenómeno ‘fan’ al ser incapaz de llegar a un compromiso con Clinton. Sin embargo, tras varias semanas de negociaciones privadas entre los dos equipos de campaña, el acuerdo ha llegado.
Así, la semana pasada, Clinton anunció nuevos planes de financiación universitaria y de servicios de salud que se acercan a las políticas defendidas por Sanders durante las primarias, al igual que también ha hecho público un compromiso de incrementar el salario mínimo nacional a 15 dólares la hora.
Con ello, tras una última semana en la que el FBI anunció que no recomienda presentar cargos contra Clinton por su uso del mail durante su periodo de Secretaria de Estado y la entrada en campaña del presidente Barack Obama para apoyarla, todos los elementos parecen alineados para que la confrontación final contra Trump de por fin comienzo.
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