Ambulancia Summa 112, Comunidad de Madrid
Los problemas en la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid se multiplican. El Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid ha imputado a varios altos cargos del departamento del Gobierno de Cristina Cifuentes por un presunto delito de prevaricación administrativa.
Según ha podido conocer la Cadena SER, el viceconsejero de Sanidad, Manuel Molina; el director general de Coordinación de Asistencia Sanitaria, César Pascual; el secretario general técnico, Luis Fernández Abad; y Santiago Cortés, director de Gestión del SUMMA, son los nombres propios después de que la empresa Ambulancias Alerta presentara una querella contra ellos el pasado 18 de diciembre.
En concreto, la compañía denunció las presiones, incluyendo varias grabaciones que muestran este modus operandi de la Comunidad de Madrid, que sufrió para que renunciasen al contrato público que habían ganado. Según informó El Español, Ambulancias Alerta incluso llegó a sufrir el impago de varias facturas por parte de la Consejería de Sanidad, que encontraron financiación 48 horas después de que, finalmente, la empresa decidiera abandonar su oferta.
En un primer momento, la Justicia decidió admitir a trámite la denuncia de la sociedad al entender que había “indicios de delitos” por parte de estos altos cargos de la Consejería de Sanidad. De hecho, como ha señalado la Cadena SER, la magistrada ha dado por buenas las grabaciones que hizo Ambulancias Alerta, al tiempo que ha solicitado la “hoja histórico penal” de los querellados y sus medios económicos.
Un caso que terminó con la renuncia final de Ambulancias Alerta a un contrato de 72 millones para gestionar el transporte para urgencias hospitalarias. En los audios que grabó la empresa se puede oír al propio viceconsejero de Sanidad, Manuel Molina, hoy imputado, alertando a la compañía de que él “no quiere salir cojo” porque, ante la baja que ofertaron para ganar el concurso, el servicio no pueda realizarse con normalidad.
“Yo esta noche no he dormido mucho pensando en esto. Es decir, es que es el servicio estrella de la Consejería y yo no quiero salir cojo. O sea que no quiero que el día que lo vaya a firmar al Consejo de Gobierno tener las ambulancias en la Puerta del Sol pitando, diciendo que esto es que lo vamos a tirar por los suelos, que vamos a quitar los sueldos y que vamos a bajar un quince por ciento”, aseveró el ‘número dos’ de la Consejería de Sanidad, tal y como recogió El Español.
Por el momento, Molina, junto a varios altos cargos, no tendrán a las ambulancias en la Puerta del Sol, pero sí tendrán que acudir a los juzgados a explicar estas presiones alrededor de un contrato público.
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