“Tras tener constancia de la incidencia en la jornada de hoy”, afirma en una nota, “se ha activado de inmediato el protocolo previsto ante este tipo de acontecimientos, avisando tanto a todas las víctimas de violencia sexual y de violencia de género que cuentan con este dispositivo, como a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, de forma que se garantizara la protección de las víctimas”.
A ello se suma que los servicios de emergencia, el denominado botón del pánico, los de recepción y emisión de llamadas y las alertas por proximidad autónomas por Bluetooth, “se han mantenido operativos en todo momento”.
La ministra de Igualdad, Ana Redondo, y la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Carmen Martínez-Perza, han estado en contacto con la UTE Vodafone-Securitas responsable del servicio, personándose incluso en la Sala Cometa, para conocer de primera mano la evolución de la incidencia.
“Tras evaluar todas las opciones técnicas, se ha detectado que el origen del problema se encuentra en un enrutador que distribuye a las diferentes plataformas los mensajes en función del tipo de alerta”. Aproximadamente, señala Igualdad, un 10% de estos mensajes están generando incidencias recurrentes que provocan una sobrecarga del sistema que, no obstante, ya está en proceso de recuperar la normalidad.







