El ministro de Exteriores de Francia, Jean-Noel Barrot (Foto: Ukrinform - dpa)
Así lo ha manifestado el ministro de Exteriores francés, Jean-Noel Barrot, quien ha señalado que este alto el fuego permitiría comprobar la «buena fe» del presidente ruso, Vladimir Putin, antes de avanzar hacia negociaciones formales.
La propuesta de Francia y Reino Unido plantea un alto el fuego por aire, mar y sobre infraestructuras energéticas, dejando fuera los combates terrestres, que serían más difíciles de verificar.
«Tras ello, empezarían las verdaderas negociaciones para una paz que queremos que sea sólida y duradera», afirmó Barrot en declaraciones a la emisora France Inter.
El plan, impulsado por Emmanuel Macron y el primer ministro británico, Keir Starmer, busca que Europa tenga un rol más activo en las conversaciones de paz, hasta ahora dominadas por Washington y Moscú.
El ministro francés ha alertado sobre el aumento de la tensión en el continente y ha respaldado la necesidad de fortalecer la defensa europea para hacer frente a la amenaza rusa.
Barrot también respondió a las declaraciones del expresidente estadounidense Donald Trump, quien advirtió sobre el peligro de una Tercera Guerra Mundial si no se alcanza un acuerdo. En este sentido, el ministro francés reconoció que «el riesgo de guerra en Europa nunca ha sido tan alto».
«Desde hace 15 años, la amenaza no deja de acercarse. La línea de frente no deja de moverse hacia nosotros», explicó, respaldando el incremento del gasto en defensa promovido por Macron desde hace siete años.
El Gobierno francés mantiene contacto frecuente con la administración de Donald Trump, pero una visita de Macron a Washington «no está prevista por el momento».
Barrot indicó que han existido conversaciones con Trump y su equipo sobre cómo resolver la crisis, aunque sin compromisos claros.
Sobre el reciente encontronazo entre Trump y Zelenski en la Casa Blanca, Barrot admitió que el tono del encuentro no fue el deseado, aunque destacó el papel del líder ucraniano: «Es un gran luchador de la resistencia y un héroe».
La propuesta de Francia y Reino Unido supone un intento de desbloquear la situación sin comprometer una presencia militar europea en Ucrania.
«Tampoco habrá tropas europeas en suelo ucraniano en las próximas semanas», aseguró Macron en declaraciones a Le Figaro, dejando claro que el plan no contempla una intervención directa.
Macron insistió en que la tregua permitiría explorar la viabilidad de un acuerdo sin conceder ventajas inmediatas a Rusia. «Queremos la paz, pero no la queremos a cualquier precio y sin garantías», afirmó.
Esta iniciativa busca dar un primer paso hacia el diálogo, pero su viabilidad dependerá de la respuesta de Moscú y el respaldo de Washington.
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