El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, junto a la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio.
La Organización de Trabajadoras Sexuales (OTRAS) critica el “feminismo burgués” del Gobierno de Pedro Sánchez por querer impugnar su inscripción como sindicato.
“Es posible que a algunas personas con una posición acomodada en el Gobierno enmascaren –tras la intocable tela del feminismo blanco heterosexual y burgués— que demandar derechos laborales para un sector empobrecido y estigmatizado es una atrocidad. Para nosotras, sin embargo, es de plena justicia”, argumenta el sindicato en Twitter.
El Gobierno va a dar marcha atrás a la inscripción como sindicato que se formalizó a comienzos del mes de agosto.
“La inscripción del sindicato se produjo a través de una resolución publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado 4 de agosto, sin embargo, la ministra de Trabajo Magdalena Valerio admitió que le habían «colado un gol por la escuadra» y expresó su intención de declararlo nulo”, informa Europa Press.
Para la organización OTRAS, los derechos laborales para sus trabajadoras “se han convertido en una utopía”.
“El feminismo abolicionista esconde una moralina y un odio visceral hacia las trabajadoras sexuales que podría comprenderse si no fuera porque los derechos los merecemos todas y no solo unas cuantas privilegiadas”, afirma el sindicato.
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