El Sabadell dice que no busca pareja tras el portazo de BBVA y abre la puerta a cobrar por los depósitos

Banca

El Sabadell dice que no busca pareja tras el portazo de BBVA y abre la puerta a cobrar por los depósitos

Oliu destaca que las negociaciones con BBVA se rompieron porque “no nos salían los números”.

El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu

La fusión con BBVA “es un tema del pasado”, según ha señalado hoy el presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, en la rueda de prensa posterior a los resultados de 2020, en la que ha asegurado que la entidad no busca otra operación corporativa sino que está centrado en “aumentar la rentabilidad” para el accionista. En la misma línea, tampoco contempla ahora mismo la venta de la filial británica, TSB, si bien ha abierto la puerta a una desinversión en cuanto surja la oportunidad.

“No forma parte de la estrategia del banco buscar una operación corporativa”, ha explicado Oliu, que ha asegurado que “el tema de BBVA pertenece al pasado”. “No nos salían los números de la manera adecuada que pensábamos para nuestros accionistas”, ha zanjado. “Lo que sí forma parte de la estrategia es la búsqueda de la rentabilidad y la mejora de la rentabilidad para el accionista enfocándonos en aquellos negocios que pueden mejorar la aportación al grupo”.

No obstante, si algunos de estos negocios no alcanzan los objetivos podría considerarse “la enajenación o la toma de alguna posición específica diferente”, ha explicado el presidente del Sabadell. Entre estos negocios podría estar la filial británica, TSB, si bien a día de hoy “el banco no ha iniciado ningún proceso de venta”. “La creación de valor es algo que se está produciendo día a día”, ha asegurado Oliu, que ha citado como fortalezas de TSB la “excelente marca” y “una plataforma que nos ha costado sudor y sangre”. En ese sentido, aunque el grupo “es flexible”, considera que “no es el momento” de una venta. “Tiene que seguir y seguirá en nuestra cartera de negocios”.

Oliu dejará en la próxima junta de accionistas sus funciones ejecutivas, cediendo el timón al nuevo consejero delegado, César González-Bueno, en una decisión que ha defendido que ha sido “conjunta” entre él mismo y el consejo de administración. La EBA propone en sus recomendaciones un modelo en el que las funciones ejecutivas recaigan en el CEO y el Sabadell ha decidido hacerlo ya en parte por un tema de “edad”, si bien Oliu no ha decidido todavía si este será su último mandato antes de jubilarse.

Quien sí se jubila es el actual consejero delegado, Jaime Guardiola, que llegó al banco con la crisis financiera, en 2007, y se marcha en plena crisis por el covid-19. “De crisis a crisis y tiro porque me toca”, ha bromeado, antes de reflexionar en estos 13 años ha habido “momentos fantásticos y otros no tanto”, pero que en general “dominan los buenos”. La marcha de Guardiola supondrá también la salida del director financiero, Tomás Varela, aunque en su caso no se jubila sino que “seguirá su camino”. Hoy mismo el Sabadell ha anunciado el fichaje de Leopoldo Alvear, de Bankia, para el puesto.

Guardiola ha asegurado en su intervención que de momento el Sabadell no está cobrando por los depósitos a los clientes particulares, aunque “esa puerta no se puede dar nunca por cerrada” en el escenario actual de tipos de interés. El banco sí traslada estos tipos negativos a clientes institucionales y empresas, pero de momento “no hemos iniciado nada con el mundo de los particulares”.

Banco Sabadell cerró 2020 con un beneficio neto atribuido de dos millones de euros, un 99,7% menos que en el ejercicio anterior, tras provisionar 2.275 millones que recogen provisiones por la crisis derivada tras el Covid-19, la ejecución de planes de reestructuración en España y Reino Unido, y completar ventas de activos problemáticos.

Más información