Según fuentes socialistas, al Código Ético del PSOE se le añadirá que “solicitar, aceptar u obtener un acto sexual de una persona a cambio de una remuneración se considera absolutamente incompatible con la militancia”. Por ello, “los órganos federales tramitarán estos casos como una falta muy grave de acuerdo a los Estatutos Federales imponiendo, además, la máxima sanción, que es la expulsión del partido”.
“Desde el PSOE consideramos que el sistema prostitucional es una expresión de violencia contra las mujeres e incompatible con los principios de los derechos humanos y la ética democrática, ya que implica tratar a las mujeres como objetos o mercancías y no como sujetos de derechos”, reza el texto que se incluirá en el citado código de la formación.
Además, se incluirá que “nos declaramos abolicionistas de la prostitución porque defendemos un modelo social que luche por la desaparición de las causas que obligan a las mujeres a prostituirse, por ser incompatible con el modelo social que proponemos, de igualdad y de respeto a la dignidad de las personas, y de defensa de los derechos humanos de las mujeres”.