La generación orgánica de capital de este año será suficiente para que los principales bancos del Ibex no deban cumplir el límite a los dividendos en efectivo. El nuevo límite que el Banco de España ha puesto a las entidades españolas para que no destinen más de un 25% de sus beneficios a pagar dividendo en metálico contempla algunas excepciones que en la práctica permitirán a los principales bancos cotizados continuar con su actual política de retribución al accionista.
En concreto, según recogen los analistas del Banco Sabadell en un informe, la ‘recomendación’ del organismo que dirige Luis María Linde contempla algunas excepciones que permitirán a los bancos exceder este límite de manera excepcional: En primer lugar que el corte Tier 1 BIII phase in (es decir, con las deducciones de Basilea III de un año) exceda el 11,5%, y en segundo lugar, que se acredite una perspectiva favorable de márgenes.
Los expertos del Sabadell consideran que estas excepciones suponen un aspecto nuevo que cambia “sustancialmente” el impacto final de la norma. Actualmente, las ratios de capital (CT1 BIII phase in) están cerca de los límites impuestos: la del Santander es del 11,1%; la de BBVA, el 11,2%; la de CaixaBank, del 12,7%; la del Banco Popular, del 11%; y la de Bankinter, del 12,2%.
Teniendo en cuenta estas ratios de capital todos estos bancos podrían evitar la limitación impuesta por el Banco de España simplemente considerando la generación de capital en el año.
El Banco de España remitió el pasado viernes, al cierre del mercado, una carta a la Asociación Española de Banca (AEB) y la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) en relación con la política de dividendos de las entidades de crédito con cargo a los resultados del ejercicio 2014.
En concreto, el supervisor bancario recomienda que los bancos sigan aplicando durante el año en curso criterios restrictivos en el reparto de resultados y que, en todo caso, los dividendos en efectivo que se satisfagan con cargo al resultado del ejercicio 2014 no excedan del 25% del beneficio consolidado atribuido.
En relación con los dividendos satisfechos mediante entrega de acciones, se recomienda que las entidades hagan un “esfuerzo adicional” para moderar este tipo de retribución, de manera que los dividendos totales tiendan hacia niveles sostenibles a medio plazo, de modo que resulte posible satisfacerlos íntegramente en efectivo en el futuro, sin que ello perjudique una adecuada constitución de reservas.
