El expresidente de Bankinter escribe una tribuna hoy en el diario El País en el que asegura que declaró sus bienes por la grave crisis de España. El expresidente de Bankinter, Jaime Botín, escribe este lunes un artículo en el diario El País después de que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) le acusara la semana pasada de haber cometido una “infracción muy grave” al ocultar durante años en Suiza y hasta 2010 un 8% de sus acciones en el banco sin que el resto de accionistas ni el mercado conocieran este hecho.
En este sentido, Botín asegura que “de engaño nada”. “El Crédit Agricole conocía desde la primera conversación conmigo de sus dirigentes, porque tuve buen cuidado de decírselo para que no se llamaran después a engaño, que yo tenía el control efectivo del banco y no solamente por mi participación accionarial, sino porque el management de la empresa y el accionariado también estaban de mi lado”. Además, asegura que su “impresión” es que el resto de accionistas de Bankinter aprueban su conducta por haber “dedicado la vida a defender su independencia y prosperidad comprometiendo en ese empeño la mayor parte de su fortuna, dentro y fuera de España”.
Por otro lado, Jaime Botín, que fue acusado en 2011 por la Fiscalía Anticorrupción de delito fiscal, afirma que él declaró a Hacienda en 2010 la fortuna que mantenía oculta en Suiza “por la grave crisis” que atraviesa España, dando a entender que lo hizo para reforzar las arcas del Estado. «Yo realicé una declaración totalmente voluntaria de todos esos bienes cuyo origen se remonta a una época muy distinta a la nuestra, porque entendía que en la actual y, en medio de la grave crisis económica que sufre el país, eso era lo que debía hacer”, afirma el expresidente de Bankinter, dando a entender que lo hizo para ayudar a las arcas del Estado. Además, asegura que “la Administración tributaria nunca me preguntó, ni indagó, ni inició investigación alguna sobre mis bienes en el extranjero”.
Según la Fiscalía, la Agencia Tributaria realizó un requerimiento a Jaime Botín en 2010 para que regularizara sus bienes en el extranjero «a la vista» de la lista de clientes del HSBC en Suiza que acababa de recibir de las autoridades francesas. Éstas, a su vez, las recibieron de Hervé Falciani. En este sentido, señala que “mi nombre no encabezaba la lista de Falciani, como se dice El Mundo, porque ni figuraba en esa lista ni en ninguna otra de las divulgadas por otros delatores.
Jaime Botín se muestra crítico con medios como El Mundo y El Confidencial que, según afirma, le han negado su capacidad para criticar aduciendo como razones su patrimonio en el extranjero.
