El Ministerio de Fomento no piensa hacer ninguna declaración sobre la situación y el malestar de las empresas constructoras en España. Tras el recorte de la obra pública decretada, las patronales piden al ejecutivo un plan de ayudas que tenga como objetivo aflojar el cinturón dentro del sector.
En concreto, las empresas demandantes de la particular FROB para la construcción son: CNC,Seopan,Anci,Aerco y Cepco. Éstas no han dudado en decir al Gobierno que su acción acarreará 615.000 nuevos despidos, así como múltiples cierres de empresas. Inclusive tendrá consecuencias negativas en las cuentas del Estado: menos cotizaciones en la Seguridad Social, disminuiría la competitividad y el crecimiento.
Además de la ayuda, piden que una búsqueda de alternativas a los ingresos a través de peajes o impuestos. Según el presidente de la patronal CNC, Juan Lazcano: “nos jugamos el prestigio de España y su lugar en el mundo” y esque el sector ya ha sufrido un millón de despidos. Otra propuesta acordada por las empresas que componen la iniciativa es la revisión de los Presupuestos Generales del Estado en 2011.
