El Banco de Japón se desmarca de la Fed: más medidas de flexibilización cuantitativa

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El Banco de Japón se desmarca de la Fed: más medidas de flexibilización cuantitativa

Banco de Japón

El banco central nipón opta por emprender planes contrarios a los de la Reserva Federal para continuar creciendo. El Banco de Japón ha sorprendido este viernes con derivas inesperadas en materia de política monetaria: el banco central japonés ha anunciado este viernes medidas adicionales con vistas a reforzar su programa de flexibilización cuantitativa. En estas líneas, el banco nipón se ha comprometido a aumentar su apuesta por bonos públicos a largo plazo y por fondos de valores domésticos.

Lo más relevante: el Banco de Japón alargará el plazo de vencimiento de los bonos comprados por el Ejecutivo japonés hasta entre 7 y 12 años, frente a los entre 7 y 10 actuales. Además, se va a mantener el objetivo global de realizar compras anuales por un valor de 80 billones de yenes (aproximadamente 600.000 millones de euros).

Incluso, el Banco de Japón ha asegurado que movilizará otros 300.000 millones de yenes a través de los fondos de renta variable negociados en el mercado de valores. Una cifra que se suma a los 3 billones que se deja anualmente, desde 2014, en Bolsa, con vistas a invertir “en capital físico y humano de manera proactiva”.

Estas noticias han sorprendido, y han dejado de manifiesto las prisas que muestra el banco central japonés por alcanzar sus objetivos inflacionarios cuanto antes. De hecho, el gobernador del banco, Haruhiko Kuroda, ha explicado este mismo viernes, en relación al tema, que estas políticas ya están teniendo resultados, y ha asegurado quela inflación subyacente se mantiene en trayectoria ascendente.

No obstante, advierte que el banco tendrá que hacer todo lo que está en sus manos para alcanzar ese 2% de meta de inflación lo antes posible.

La medida ha levantado cierto escepticismo ante el choque entre las últimas decisiones de la Reserva Federal estadounidense con las del Banco de Japón. En este sentido, el propio gobernador ha reconocido en una conferencia que es probable que la gente no entienda la necesidad de mantener las medidas de flexibilización en un momento, en principio, mejor para la economía.

Pero insiste: las nuevas medidas se han diseñado para facilitar que el Banco de Japón mantenga las políticas actuales. Es decir: estas medidas se están reforzando, pero expandiéndose adicionalmente.

De momento, con esta decisión, la apuesta de la Reserva Federal por aumentar los tipos de interés por primera vez en, prácticamente, diez años esta misma semana ejerce nuevas presiones sobre el yen: las posibilidades de debilitarse frente al dólar se avecina inminente.

Pero el gobernador del banco central japonés se ha negado a hablar directamente sobre la deriva y cambios de la política monetaria de la Fed. No obstante, también ha reconocido la recuperación parcial de la economía estadounidense.

Queda por ver cómo afecta esta decisión a las políticas monetarias emprendidas por los bancos centrales de todo el mundo.

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