La eléctrica controlada por Enel revisa ligeramente al alza sus previsiones de Ebitda. Endesa repartirá vía dividendos la totalidad de sus beneficios entre este año y 2019, una decisión que forma parte de la actualización de su plan estratégico. La mayor parte de esta retribución irá a parar a su matriz, la italiana Enel, que posee el 70% de su capital social.
La decisión de Endesa de mantener un payout del 100% durante un período de cinco años no tiene precedentes en la Bolsa española.
La compañía explica en un comunicado a la CNMV que el dividendo a cuenta de los ejercicios 2015 y 2016 será del 100% del beneficio atribuido, en caso de que esta cifra sea superior a aumentar un 5% el dividendo abonado a cuenta del ejercicio anterior. Para los años 2017, 2018 y 2019, el dividendo a pagar será del 100% del resultado atribuido. Ello “salvo cuando concurran circunstancias excepcionales, que serán debidamente anunciadas”.
La intención del consejo de administración de Endesa es que el pago del dividendo ordinario se realice exclusivamente en efectivo mediante su abono en dos pagos (enero y julio) en la fecha concreta que se determine en cada caso y que será objeto de adecuada difusión.
“Se recuerda no obstante que la capacidad de Endesa de distribuir dividendos entre sus accionistas depende de numerosos factores, incluyendo la generación de beneficios y la disponibilidad de reservas distribuibles, y no puede asegurarse los dividendos que, en su caso, vayan a pagarse en los ejercicios futuros ni cuál será el importe de los mismos”, añade.
El plan de hoy es una actualización del presentado en octubre de 2014, después de que Endesa traspasara sus activos en Latinoamérica a Enel. En aquel entonces anunció que aumentaría el dividendo por acción a un ritmo de al menos el 5% entre 2015 y 2016, desde los 0,76 euros que desembolsó como dividendo ordinario con cargo al ejercicio 2014. Además de este, la eléctrica repartió el año pasado dos dividendos extraordinarios de 7,795 y 6 euros por acción respectivamente (más de 14.000 millones de euros).
Mejores previsiones
Por otro lado, la eléctrica ha revisado ligeramente al alza sus previsiones. Espera cerrar este año con un beneficio bruto de explotación (Ebitda) de al menos 3.000 millones de euros y un resultado neto de al menos 1.000 millones, por encima de objetivos anteriores de 3.000 y 1.000 millones, respectivamente.
Para el año que viene, el grupo energético prevé un Ebitda de 3.200 millones de euros y un beneficio neto de 1.300 millones, frente a los respectivos 3.100 millones y los 1.200 millones esperados anteriormente. El grupo también realizó previsiones para 2017, cuando espera obtener un Ebitda de 3.100 millones y un beneficio neto de 1.200 millones.
