CSICA presenta una demanda de ejecución colectiva de sentencia ante la sala de lo Social de la Audiencia Nacional. Indignación en los trabajadores de Liberbank tras conocerse que el banco repartirá este viernes el primer dividendo de su historia al mismo tiempo que mantiene en vigor un ERE temporal que supone recortes de jornada y salario, y que todavía no ha devuelto a los empleados el dinero del anterior ERTE, anulado definitivamente por el Tribunal Supremo.
En concreto, Liberbank ha sido condenado a reponer a los trabajadores en las condiciones laborales previas a las medidas de ajuste contenidas en el acuerdo laboral aplicado en verano de 2013. El banco surgido de la fusión de Cajastur (CCM), Caja Cantabria y Caja Extremadura no sólo no ha cumplido todavía con esta sentencia, sino que además sus cálculos económicos son muy diferentes a los que manejan los sindicatos: la entidad ha calculado que las indemnizaciones le costarán seis millones de euros, mientras que los representantes de los trabajadores hablan de casi 70 millones.
CSICA, que califica de “vergonzoso” el anuncio del dividendo, ya presentó hace unos días una demanda de ejecución colectiva de sentencia ante la sala de lo Social de la Audiencia Nacional, para que sea este tribunal el que fije el criterio para que el banco devuelva a los trabajadores el dinero que les corresponde.
Pero además el sindicato considera que es “inadmisible que mientras los trabajadores de Liberbank estamos soportando unas medidas de recortes salariales salvajes hasta 2017 por un importe anual de unos 130 millones de euros, ahora se anuncie que se van a repartir 40 millones entre los accionistas”. A juicio de la formación, “implica un trasvase descarado de las rentas del trabajo a las rentas de capital, fiel reflejo del capitalismo salvaje imperante tras la reforma laboral”.
“El comportamiento de Liberbank es aún más grave y bochornoso”, añade CSICA, porque los trabajadores, al estar inmersos dentro de un ERTE temporal basado en reducciones de jornada, están inscritos en las oficinas del INEM “percibiendo desempleo y cotizaciones sociales a cargo del Estado; o lo que es lo mismo a cargo de los contribuyentes”. “¿No constituye esto un fraude?”, se pregunta.
“Quienes debemos cobrar primero lo que se nos debe somos los trabajadores, en vez de los especuladores que han acudido al capital de Liberbank como moscas a la miel para quedarse con lo que hace unos años era de todos los ciudadanos”, sentencia el sindicato.