Unicef: 50 millones de niños viven lejos de su hogar y en peligro

Crisis de los refugiados

Unicef: 50 millones de niños viven lejos de su hogar y en peligro

Refugiados

Líbano es el país que acoge más refugiados: 1 de cada 5 personas que viven en el país son refugiados. En España, hay uno por cada 7.739 personas. Alrededor de 50 millones de niños se han visto obligados a huir de sus hogares de nacimiento para escapar de la violencia o la pobreza extrema que asola sus países. Esta es la conclusión del demoledor informe que acaba de publicar UNICEF, titulado ‘Desarraigados’, en el que alerta de los peligros a los que estos niños se tienen que enfrentar: el riesgo de ahogarse en las travesías por mar, de sufrir desnutrición y deshidratación, o de ser víctimas de la trata, de secuestros, violaciones e incluso de asesinatos.
 
Asimismo, el documento también recuerda la discriminación y la xenofobia que sufren los niños durante el camino y una vez en el lugar de destino.
 
“Las impactantes imágenes de niños, como la del pequeño Aylan Kurdi, que apareció en una playa después de ahogarse en el mar, o de la cara atónita y sangrante de Omran Daqneesh, sentado en una ambulancia después de que su casa resultara destruida, han conmocionado al mundo”, ha declarado el director ejecutivo de UNICEF, Anthony Lake. “Pero cada imagen, cada niña o niño, representa a muchos millones más que están en peligro y esto exige que nuestra conmoción por esos casos concretos se traduzca en acciones en favor de todos los niños”, recuerda Lake.
 
La mitad de los refugiados son niños
 
Los niños representan un porcentaje desproporcionado y creciente de todas las personas que han buscado refugio fuera de sus lugares de nacimiento: aunque suponen un tercio de la población mundial, constituyen cerca de la mitad de todos los refugiados.
 
De los 28 millones de niños que han huido de su casa por la violencia, 11 millones son refugiados y solicitantes de asilo mientras que 17 millones viven desplazados dentro de sus propios países. Además, cada vez hay más niños que cruzan las fronteras solos, advierte la agencia de la ONU para la infancia: en 2015, más de 100.000 menores no acompañados solicitaron asilo en 78 países, el triple que en 2014.
 
Por otro lado, a pesar del debate en Europa sobre la acogida de refugiados, lo cierto es que es fuera de sus fronteras donde se está acogiendo a más refugiados: en Líbano 1 de cada cinco personas que viven en el país son refugiados, mientras que en España hay uno por cada 7.739 habitantes.
 
Los migrantes aportan más que las ayudas que reciben
 
El informe sostiene que en aquellos lugares donde hay rutas seguras y legales la migración puede ofrecer oportunidades para los niños que migran y las comunidades a las que se unen. Además, un análisis del impacto de la migración en los países de acogida sostiene que los migrantes aportan más que las ayudas que reciben y que contribuyen al crecimiento económico.
 
Sin embargo, una cuestión fundamental es que los niños que han tenido que huir a la fuerza de sus hogares ven limitado su acceso a servicios como la educación, siendo este uno de los principales factores por los cuales muchos niños y familias se ven obligados a migrar. Un niño refugiado tiene cinco veces más probabilidades de no asistir a la escuela que un niño no refugiado. Cuando pueden acudir a la escuela, los niños migrantes y refugiados suelen ser víctimas de discriminación, entre otras razones por un trato injusto y por acoso.
 
Fuera del aula, los obstáculos legales impiden que los niños refugiados y migrantes reciban servicios en igualdad de condiciones que los niños que son nativos de un país. En el peor de los casos, la xenofobia puede llegar a convertirse en ataques. Sólo en Alemania, las autoridades registraron 850 ataques contra los albergues de refugiados en 2015.
 
En España viven 599.000 niños y niñas migrantes (incluyendo refugiados y solicitantes de asilo. Según datos de Eurostat 2015, los niños cuyos padres son migrantes, tienen un 50% más de probabilidades de vivir en situación de pobreza que el 23,8% de niños cuyos padres nacieron en España.
 
UNICEF Comité Español hace un llamamiento a los gobiernos para que eliminen las barreras al disfrute de sus derechos de los niños migrantes y refugiados y paliar la situación de vulnerabilidad en la que viven, ya que son uno de los colectivos que más sufren la desigualdad en el ámbito educativo y la pobreza.
 
En concreto, UNICEF insta a España a acelerar el cumplimiento de sus compromisos en materia de reubicación y reasentamiento de refugiados y debe abrir vías legales y seguras para que los niños migrantes y refugiados puedan llegar a nuestro país sin arriesgar su vida o su integridad física y moral. Además deben flexibilizar las condiciones en los procesos de reunificación familiar, una de las vías legales y seguras más importantes para proteger a la infancia.
 
Seis acciones para proteger a los niños
 
El informe señala seis acciones específicas para proteger y ayudar a los niños desplazados, refugiados y migrantes:
 
-Proteger a los niños refugiados y migrantes, especialmente a los no acompañados, de la explotación y la violencia.
 
-Acabar con la detención de niños migrantes, o los que esperan obtener la condición de refugiados, mediante la adopción de medidas alternativas.
 
-Mantener unidas a las familias como la forma más adecuada para proteger a los niños y garantizarles un estatus legal.
 
-Garantizar el acceso a la educación a todos los niños refugiados y migrantes y darles acceso a servicios de salud y a otros servicios de calidad.
 
-Insistir en la necesidad de abordar las causas subyacentes a los movimientos a gran escala de refugiados y migrantes.
 
-Promover medidas para combatir la xenofobia, la discriminación y la marginación, así como la correcta integración social.

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