Javier Algarra abre el programa con un alegato en defensa de la presunción de inocencia y en contra de “las penas de telediario”. “Esta silla está hoy vacía. La tenía que ocupar Mario Conde, que como cada lunes había confirmado su asistencia. Pero como pueden imaginar, Mario no ha podido venir. Está detenido”. Con este gesto de apoyo comenzó Javier Algarra ‘El Gato al agua’ el pasado lunes, día en que el exbanquero fue detenido por presunto blanqueo de capitales, junto a sus hijos, su yerno y otras personas.
Tras estas palabras, el presentador de Intereconomía, hizo un alegato en favor de la presunción de inocencia y contra las “penas de telediario”: “No sabemos si (Mario Conde) es culpable o inocente, eso deberá determinarlo la Justicia, pero vamos a aplicar la presunción de inocencia que reclamamos para todos. Siempre lo hacemos y ustedes lo saben”, apuntaba Legarra.
“Estamos ya hartos de las penas de telediario, condenando en los medios de comunicación a las personas antes de saber si son o no culpables” asegura Legarra, que añade que “si Mario Conde ha cometido algún delito que lo juzguen y en su caso lo condenen. Pero no seremos nosotros quienes lo hagamos hasta saber qué es lo que ha ocurrido”.
En otro momento de su discurso, Legarra adelanta que el programa se centraría en el “modo en que la Justicia trata a las personas, de aquellos a los que meten en un coche de policía poniéndoles la mano en el cogote -en referencia a Rodrigo Rato- y de esos otros que declaran cómodamente en una comisión parlamentaria y se permiten el lujo de preguntarse qué coño es eso de la UDEF” -en referencia a Jordi Pujol.
“Nos preguntaremos si existe o no un doble rasero, hablaremos de Mario Conde, del ministro Soria, de la familia Pujol y de las medidas cautelares que se aplican en cada caso”, concluía el presentador de Intereconomía.
