La prensa dedica hoy sus atenciones al pleno monográfico sobre Afganistán, la indignación del Gobierno de Marruecos por la visita de Mariano Rajoy a Melilla, la ofensiva de Esperanza Aguirre contra los liberados sindicales, y la respuesta de Nicolas Sarkozy a Bruselas por sus críticas a la expulsión masiva de Francia de gitanos rumanos.
Para soltar adrenalina, empezamos con los ‘cabreos’ como el que mostró el primer ministro marroquí con el líder de la oposición por viajar a una ciudad autónoma española. Como llueve sobre mojado, y llevamos todo el verano hablando de las ‘delicadas’ relaciones con el país vecino, sólo decir que Pedrojota considera que para provocación la de Marruecos y exige al Gobierno español que apoye a Rajoy.
El otro enfado, el del presidente francés con la UE por cuestionar su política de expulsión de gitanos rumanos, abre la portada de El País, que hace hincapié en la “sorna” con que el mandatario galo respondió a las críticas de la comisaria europea a la que aconsejó que si tanto le importan los gitanos que los acoja en Luxemburgo. El Mundo considera que Sarkozy ha perdido el control y la razón y le recuerda que las deportaciones ponen en evidencia el “talante xenófobo” de su Gobierno.
El País también está cabreado, pero en este caso con Esperanza Aguirre por su ofensiva contra los liberados. Considera el diario de Prisa que “este nuevo ataque al sindicalismo, en la estela de Margaret Thatcher”, tiene una vocación populista y peligrosa: “desviar contra trabajadores estigmatizados como privilegiados la indignación de los afectados por el paro o la precariedad”, y subraya que “de paso pone en evidencia al líder de su partido, un Rajoy siempre forzado a avalar a posteriori lo que ella lanza al escenario”. Y hablando de Rajoy, Abc cree que abordó con responsabilidad la cuestión de Afganistán, mientras que para El Mundo fue Zapatero quien hizo gala de responsabilidad. Cuestión de matices.
