Señor embajador de su graciosa majestad la reina Isabel II de Gran Bretaña, e Irlanda del Norte y paraísos fiscales varios, esta misma mañana ha cumplido con su deber entregando al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, la carta de la primera ministra Theresa May en la que invoca el artículo 50 del Tratado de Lisboa para negociar la salida de su país de la Unión Europea. Qué contento se pondrá el innombrable de la Casa Blanca animando a otros para que sigan ese camino. Pero bromas no, el precio de este desplante debería ser disuasivo. El que se va, que la pague. Veremos.
Precisamente, la decisión de Sánchez será la gran referencia que tendrán los inversores la próxima semana, algo que se conjugará con la publicación de…