La vicepresidenta ha dado la callada por respuesta ante las constantes preguntas de los periodistas sobre la alusión al machismo del candidato del PP a las europeas tras el debate con Valenciano. Soraya Sáenz de Santamaría ha evitado, de todas las maneras posibles, manifestarse sobre la polémica desatada ante las declaraciones de Miguel Arias Cañete, que ha asegurado que enfrentarse a una mujer en un debate es complicado porque “puede parecer que estas acorralando a una mujer indefensa”, en referencia a su ‘cara a cara’ con Elena Valenciano.
La vicepresidenta del Gobierno ha sorteado todas las cuestiones al respecto, ‘abandonando’ así a su suerte al exministro de Agricultura.
Lejos de lanzar un guante a Cañete, como sí ha hecho Ana Botella en una entrevista en la SER, Santamaría se ha escudado en que “no puedo hacer valoraciones desde la mesa del Consejo de Ministros” sobre el debate celebrado ayer en TVE entre los cabezas de lista del PP y del PSOE ni sobre “sus declaraciones”.
Esta ha sido la frase que una y otra vez ha repetido la vicepresidenta cada vez que un periodista tomaba la palabra para preguntarle su opinión sobre el mencionado ‘cara a cara’ y, en especial, sobre las declaraciones machistas de Cañete. Lo único que ha dicho la ‘número dos’ del Ejecutivo es que “es bueno que haya debate y que haya información. Hasta ahí puedo decir”.
A pesar de esto, Santamaría no ha podido evitar que este tema monopolizase la rueda de prensa de un Consejo de Ministros más ‘light’ que nunca, ya que solo se ha presentado un informe sobre coyuntura turística en España, y elaborado con datos que ya se conocían.
Según aseguran algunos medios, es posible que esta tarde la vicepresidenta rompa este silencio y hable al respecto en el mitin que tiene previsto realizar en Murcia junto a Ramón Luis Valcárcel.
