El partido que lidera el diputado de IU ve con “sorpresa” e “incredulidad” el ofrecimiento del exjuez al PSOE para “derrotar a la derecha”. Baltasar Garzón, y su oferta al PSOE, han hecho saltar todas las alarmas en Izquierda Abierta. Un día después de conocerse el ofrecimiento del exjuez y varias personalidades de la izquierda a Alfredo Pérez Rubalcaba para “derrotar a la derecha”, el partido que encabeza Gaspar Llamazares aún no entiende esta decisión. Tal es así que la cúpula de su partido se reunirá mañana en una ejecutiva que girará en torno al paso dado por Garzón.
Lejos quedan los días en los que desde el entorno de Llamazares se veía a Garzón como el candidato idóneo para encabezar la lista de un frente de izquierdas a las elecciones al Parlamento Europeo del próximo mes de mayo. Ahora esta relación parece haberse dinamitado.
Todo, por la decisión del exjuez, y de diversas personalidades de la izquierda, de hacer un guiño al PSOE al ponerse a disposición de este partido para la conferencia política que se celebrará este fin de semana y en la que se definirá el nuevo camino de los socialistas.
La carta con la que Garzón ha desvelado esta oferta de colaboración ha desatado una auténtica indignación en las filas de Izquierda Abierta. “Sorpresa”, “incredulidad” y “asombro” son algunos de los calificativos más repetidos por representantes de la formación que lidera Llamazares.
El propio diputado de IU ha mostrado en su Twitter su malestar al respecto.
“Izquierda Abierta tiene como única referencia a IU y su apertura en un frente amplio de la izquierda, del que no forma parte el PSOE”, ha asegurado Llamazares. Y es que, “l manifiesto hacia la conferencia política del PSOE es unilateral, ajeno a Izquierda Abierta y contrario a su estrategia de frente amplio”.
Estas críticas se pondrán de nuevo de manifiesto mañana por la tarde en la reunión de la Ejecutivo que, según fuentes del partido, se ha convocado con un único tema: dar respuesta al guiño de Garzón al PSOE.
Y es que, para Izquierda Unida el “Frente Amplio de izquierdas” que se necesita, “en ningún caso, puede ser participado por un PSOE que es cómplice y muñidor del actual estado de cosas y de la deriva antisocial que desde hace años ha emprendido el Estado español”.
