El censo para que los españoles residentes en el extranjero cerró el pasado 1 de agosto “sin aviso institucional”. El PP ha pospuesto la decisión de eliminar las trabas para votar en el extranjero hasta 60 veces, a pesar de que había asegurado que trataría este tema en el Congreso de los Diputados, según ha informado El País. Así, ha acabado la legislatura y el sistema del voto rogado estará vigente en los próximos comicios.
Este sistema de elección fue aprobado durante la primera legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero, y supone que los españoles que viven fuera del país necesiten solicitar su derecho a voto para poder participar en las elecciones. Al ser un sistema complejo, los niveles de participación se han reducido drásticamente. De hecho, desde las elecciones de 2008 hasta las de 2011 el número de votos de extranjeros cayó del 30% al 5%, según este mismo medio.
La oposición ha manifestado su interés por cambiar esta ley a raíz de las numerosas críticas que está recibiendo, especialmente por los emigrantes, e incluso algunos han manifestado su sospecha de que al PP no le beneficia que estas personas voten.
Y es que, desde 2011 hay en la Cámara baja una proposición de ley lanzada por el Parlamento de Galicia que podría haber sido utilizada para modificar el voto rogado. Por el contrario, esta proposición lleva cuatro años en la Comisión Constitucional del Congreso. Desde entonces se ha pospuesto su debate 60 veces, hasta el final de la legislatura.
Para que un español residente en otro país pueda votar tiene que estar registrado en el Censo Electoral de los Residentes Ausentes (CERA), lo que debe hacerse en los consulados. Sin embargo, esta inscripción se debe hacer con mucha antelación, ya que la fecha de inscripción cierra dos meses antes del anuncio de elecciones. En este caso, el CERA cerró el 1 de agosto. Además, la Marea Granate, el colectivo de los emigrantes, ha denunciado que la ley incide en que este censo se cierre “sin aviso institucional”.
