La Plataforma en Defensa de la Dependencia informa que el consejero se ha comprometido a devolver parte del gasto farmacéutico de los menores grandes dependientes. La sensibilidad del Gobierno castellano-manchego respecto a los dependientes ha comenzado a cambiar con la llegada del equipo de Emiliano García-Page y la Plataforma en Defensa de la Dependencia de Castilla-La Mancha se está encargando de proclamar a los cuatro vientos su satisfacción por los cambios que anuncian van a producirse tras la marcha de María Dolores de Cospedal.
De momento, este colectivo se ha reunido con el nuevo consejero de Sanidad, Jesús Fernández, un encuentro que, según la el presidente de la plataforma, Luis Gómez-Ocaña, “ha dado como resultado dos compromisos de mucho calado y que pueden ser muy importantes para las personas en situación de dependencia” de la región”, destacando expresamente las propuestas que le han presentado “han tenido una excelente acogida por parte del consejero” y “el compromiso firme de estudiar la forma de llevarlas a cabo”.
Gómez-Ocaña, explica que Jesús Fernández se ha comprometido a estudiar el “establecimiento de una tarjeta identificativa de cuidador de gran dependiente con la que se tendría prioridad en la atención en las consultas del médico de familia, consulta con especialistas, atención en urgencias, prioridad en las listas de espera para pruebas diagnósticas y actuaciones quirúrgicas” Adelantando que “también se va a estudiar la posibilidad de ampliar esta prioridad al resto de gestiones a realizar ante las distintas administraciones autonómicas”.
La segunda medida de “calado” que estudiará el Ejecutivo regional, a propuesta de dicha plataforma es devolver parte del gasto farmacéutico de cuidar a menores dependientes, en función de unos límites de renta que establecería la Consejería de Hacienda.
Desde la plataforma se hace notar que esta última propuesta es muy importante especialmente en el caso de familias con mejores de edad que son grandes dependientes y que no tiene tarjeta sanitaria propia “ya que la familia debe costear en muchos casos el 50% de sus medicaciones, pañales…, con el elevado coste económico que ello conlleva”.
El presidente de la Plataforma hace hincapié en que el hecho de que el Gobierno sufrague parte del gasto farmacéutico a los menores “puede suponer un avance excepcional en la mejora de las condiciones de vida de miles de niños grandes dependientes que, de forma inmisericorde, han visto como el pago de la medicación y demás necesidades en función de sus enfermedades impiden, en muchísimos casos, que sus familias puedan ofrecerles los cuidados y atenciones que son vitales para ser atendidos”.
