Hacienda revela que el PP pagó su sede de Bilbao con donaciones para proteger de ETA a sus concejales

Hacienda revela que el PP pagó su sede de Bilbao con donaciones para proteger de ETA a sus concejales

Un informe revela que parte de la hipoteca del inmueble se pagó con los fondos destinados a proteger a los concejales del partido de ETA.

Oficina de la Agencia Tributaria

Demoledor informe de Hacienda sobre la sede del PP en Bilbao. El documento, que la elaborado la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), organismo dependiente del departamento de Cristóbal Montoro, pone de manifiesto que el partido habría pagado parte de la hipoteca del inmueble con los donativos realizados por los ciudadanos para poner seguridad privada a los responsables ‘populares’ en Euskadi. Según recoge Vozpopuli.com, el informe fue elaborado en febrero de 2014 a petición de la Fiscalía Anticorrupción, que pedía investigar algunos documentos entregados por el extesorero del PP Luis Bárcenas al juez Pablo Ruz al sospechar de que se habían podido producir diversas irregularidades en la adquisición de la sede del PP de Bilbao.

Este documento ya está en manos del juez de la Audiencia Nacional, que lo ha incorporado al sumario del caso de los ‘papeles de Bárcenas’, y en él se detalla cómo el PP habría pagado parte de la hipoteca con fondos de una contabilidad paralela llamada ‘Sede Vizcaya’, que presuntamente se habría nutrido de una cuenta de donativos que el partido tuvo abierta entre 1998 y 2005 para dotar de seguridad privada a sus cargos públicos en el País Vasco.

Aunque no se queda ahí, ya que el informe de los expertos también señala que se produjeron al menos once transferencias ‘sospechosas’ que no se registraron en la contabilidad oficial del PP.

Pero la polémica sobre la contabilidad de los ‘populares’ no acaba ahí. Según este mismo diario, Hacienda también ha denunciado que el PP trucó las fechas de la reforma de su sede de Génova para evitar el pago de impuestos. Concretamente, los peritos del Ministerio afirman que “la facturación se produce en ejercicios diferentes a la entrega de la obra lo que podría tener efectos fiscales “.

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