Codere encaja con caídas del 9% las cifras de su reestructuración financiera

Las cuentas del segundo trimestre de Codere recogerán el impacto definitivo de su plan de reestructuración: más fondos propios pero también pérdidas por más de 1.000 millones. Codere sufre pérdidas en Bolsa que alcanzan el 9% con el encaje final en balance de su reestructuración financiera. Después de dos sesiones consecutivas de fuertes avances, la cotizada de los juegos de azar cae con fuerza al conocerse que las cuentas del segundo trimestre recogerán un deterioro adicional de 1.054 millones de euros.
 
El encaje de este proceso por el que se salva la debilitada salud financiera de Codere y los bonistas han relevado a la familia Martínez Sampedro como accionistas de referencia pasa por el registro de pérdidas adicionales por 1.054 millones de euros y el incremento de capital propio en 1.880 millones, según figura en la documentación remitida por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
 
Así es que el primer semestre del año terminó para la firma de casinos, bingos y máquinas tragaperras con pérdidas por 1.137 millones de euros frente a los 48,7 millones registrados en rojo el ejercicio precedente. El incremento de fondos propios viene por el canje de 1.284 millones en antiguos bonos por 485 millones de nuevos papeles de deuda y 2.475 millones de nuevas acciones valoradas en 0,76 euros la unidad, según figuraba ya en su plan de reflote.
 
La compañía ha adelantado además que sigue “reforzando la buena tendencia operativa iniciada a finales de 2014” con cifras como el incremento de Ebitda ajustado para España e Italia del 37% y el 35%, respectivamente. Lo que habría facilitado la captación de 386 millones de euros adicionales para el pago de deuda existente y posibles inversiones en nuevos proyectos de crecimiento.
 
A lo largo del último mes, la gráfica de Codere ha sumado un 17,5% arriba al punto de que su capitalización bursátil ha recuperado ya los 1.190 millones de euros. No obstante, las tensiones derivadas de su brusco ajuste de capitales se siguen traduciendo en un desplome acumulado del 42% en su valoración desde que empezó el año.