Los inversores recogen beneficios tras el ‘profit warning’ de Adidas, la crisis del Espirito Santo y la suspensión de pagos de Argentina. Jornada frenética en la última sesión bursátil de julio. Las bolsas europeas registran caídas generalizadas. El mayor correctivo lo sufre el parqué de Portugal por la incertidumbre que rodea al atribulado Banco Espirito Santo, que se desploma más de un 45%. El Ibex 35 se deja casi un 2% y pierde el umbral de los 11.800 puntos en una jornada caracterizada por el aluvión de resultados empresariales y por la suspensión de pagos de Argentina. Todos los valores del selectivo sufren pérdidas.
Telefónica y Santander, dos pesos pesados, han publicado hoy sus resultados del primer trimestre, ambos por encima de lo esperado. En contraste, Grifols recibe la presentación de sus cuentas con un desplome del 15%. Estas noticias coinciden con el fracaso en las negociaciones entre Argentina y los fondos buitre para evitar la suspensión de pagos del país. Los analistas, no obstante, no creen que el ‘default’ tenga mucho impacto en el mercado español, a pesar de la exposición de varias compañías españolas. De hecho, entre los valores más castigados del Ibex no se encuentran empresas con mayor presencia en Argentina, como Telefónica o Mapfre.
Otras grandes empresas europeas también traen noticias negativas. Como Adidas, que se desploma un 14% después de anunciar un ‘profit warning’. Como resultado, el sector del consumo discrecional lidera las caídas en Europa.
A la espera de mayores referencias sobre Argentina, el mercado de deuda pública mantiene la calma. El interés exigido al bono español a diez años se mantiene en el 2,48%, mínimos históricos y la prima de riesgo en 132 puntos.
