Kiev ha echado mano de los argumentos de la lucha antiterrorista para comenzar a sofocar las revueltas prorrusas. La primera operación ha tenido lugar en la región de Donetsk. Ucrania ha comenzado a sofocar las revueltas prorrusas de algunas provincias orientales del país a base de fuerza militar. Un movimiento para el que las autoridades de Kiev se han parapetado en el argumento de la lucha antiterrorista por la escalada de violencia que se ha podido apreciar en algunas ciudades.
La voz de alarma la ha dado el ministro del Interior ucraniano, Arsen Avakov. El primero objetivo de este nuevo dispositivo contra la corriente secesionista que sufre el país se encuentra en la ciudad de Slaviansk, una de las más importantes de la región de Donetsk. Uno de los óblast fronterizos con Rusia en el que las protestas de la población a favor de la anexión a Moscú se han radicalizado más en los últimos días.
En el marco de la operación, Kiev ha dado orden para el trasladado de fuerzas de seguridad de todas las unidades del país a la ciudad. Así se busca ahogar el reciente poder con el que se ha hecho la autodenominada Milicia Voluntaria de Donbas tras haber ocupado la comisaría central y la sede del Servicio de Seguridad de Ucrania en la ciudad de Slaviansk, en cuyas inmediaciones ha llegado a establecer controles de carretera.
El ministro de Interior ucraniano ha recomendado ya a la población civil que abandone el centro de la ciudad para evitar daños en las escaramuzas que pudieran producirse. Y es que, según su versión, los separatistas prorrusos habrían disparado en varias ocasiones contra las fuerzas del orden del país sin mediar palabra. Desde las filas de los rebeldes se asegura, según recogen agencias, que los disparos se habrían producido sólo después de la entrada de seis carros blindados en el principal puesto de control que ellos habían instalado.
Los primeros balances oficiales de la operación, de los que daba cuenta el propio ministro a través de su página de Facebook, un oficial de los servicios de seguridad ucranianos habría resultado muerto y otros cinco heridos de distinta consideración. Entre ellos, un jefe de la sección táctica de asalto del contingente. Igualmente se tiene constancia de que ha fallecido un número «todavía no identificado» de separatistas, informó el representante gubernamental.
