Beppe Grillo, el cómico ‘antisistema’, y Citigroup, una de las principales entidades de Wall Street, coinciden en una cosa: el futuro de Italia pinta negro. Aunque el líder del Movimiento Cinco Estrellas es más pesimista que los analistas de la entidad y vaticina un país quebrado para después de verano.
Desde Citigroup, sin embargo, opinan que el desastre llegará más a medio plazo. El banco estadounidense no ve con malos ojos el nombramiento de Giorgio Napolitano, pero destaca que tiene 88 años de edad y que, si se mantiene durante todo su mandato, abandonará la presidencia de la República con 95 años de edad.
Los analistas de la entidad consideran que, dado el desolador panorama político italiano, al país le vendrá bien mantenerse unos meses más, quizá años, «en piloto automático». A fin de cuentas, la coalición de centro izquierda hasta ahora liderada por Pier Luigi Bersani acaba de sumirse en una grave crisis interna, el PDL sigue siendo una finca privada de Silvio Berlusconi, Mario Monti ya no tiene apenas voz y voto en ningún lado y Beppe Grillo no ha sido capaz, todavía, de estructurar su movimiento. Y puede que nunca lo sea.
El problema, no obstante, es qué va a suceder si este horizonte no se despeja más pronto que tarde. Es muy probable que los mercados financieros, que de momento se muestran benévolos, comiencen a golpear a Italia en los próximos meses. Grillo ya ha aportado su granito de arena asegurando que el país, amén de ser ingobernable, está totalmente quebrado.
«Las pequeñas y medianas empresas quiebran. En septiembre u octubre se le acabará el dinero al estado y tendrá problemas para pagar sueldos y pensiones», ha asegurado Grillo en una entrevista concedida al diario alemán Bild, en la que asegura que su formación no es la culpable del desgobierno en Italia.
