“Era un momento en el que había que ayudar al país”, ha reflexionado sobre la puesta en marcha de la Sareb en 2012. El presidente de la Sareb, Jaime Echegoyen, ha aprovechado su intervención en el curso de verano organizado por la APIE en la UIMP de Santander y patrocinado por BBVA, para deslizar unas ligeras críticas precisamente al banco que preside Francisco González, único gran actor del sector financiero que se negó en redondo a invertir en el denominado ‘banco malo’.
Echegoyen, que en esos momentos era consejero delegado de Bankinter, ha señalado que en cuando se puso en marcha la Sareb “había de todo menos tiempo para discutir de ello”. “Era un momento en el que había que ayudar al país”, ha reflexionado, para añadir que “de haber habido más “disidencia” podría haberse producido un “efecto dominó” que se llevase por delante “al banco malo y a los bancos buenos”.
El presidente de la Sareb ha apuntado que además no era una inversión muy alta, ya que el capital total con el que se constituyó la sociedad fue de 4.800 millones de euros para unos 51.000 millones de euros de activos. “Se hizo lo que había y se pudo hacer en el momento”, ha explicado al respecto, aunque “cada uno hizo sus consideraciones”. Lo importante, ha zanjado, es que “la solución sirvió”.
El ex de Bankinter ha defendido que en lo que va de año el ‘banco malo’ vende unos 25 inmuebles por día, en línea con la media de 27 al día desde que se puso en marcha en 2012. Echegoyen ha defendido en ese sentido la estrategia puesta en marcha desde su llegada para que la Sareb, frente a la venta de grandes carteras que realizan los grandes bancos, ya que, según ha dicho, no tiene forma de compensar ventas a pérdidas.
Respecto a la propuesta de Podemos de convertir la Sareb en un parque público de alquiler social de viviendas, Echegoyen ha recordado que la sociedad nació de un acuerdo supranacional, por lo que habría que exlicarlo ante el Parlamento español primero y después ante Bruselas. Además, ha apuntado que actualmente cuenta con unos 43.000 millones de euros en activos, que, de ponerse en el sector público, se traduciría en sumar otros 4 puntos del PIB al déficit público. “Yo no sé si se puede esconder debajo de la mesa y olvidarlo”, ha dicho.
No obstante, el presidente de Sareb ha destacado que “desde hace algún tiempo tenemos un plan de alquiler asequible” que sirve para “dar aire” a la problemática de la vivienda. En concreto, el banco malo tiene unas 2.000 viviendas para estos fines.
