El Sabadell destaca que más de un 50% de las nuevas hipotecas que firma la entidad cuentan con un tipo de interés fijo. El escenario de tipos negativos por las medidas del Banco Central Europeo (BCE) amenaza con poner también bajo cero la rentabilidad bancaria en España, una situación ante la que las entidades españolas están reaccionando apostando cada vez más por tipos de interés fijos en el producto que supone su principal fuente de negocio: las hipotecas.
Las hipotecas a tipo fijo son todavía muy minoritarias en España, pero poco a poco van dejándose notar dentro del mercado hipotecario. De acuerdo con las últimas cifras publicadas por el INE, el 89,8% de las hipotecas constituidas en enero utilizaba un tipo de interés variable, frente al 10,2% de tipo fijo. En el mes anterior las hipotecas a tipo fijo suponían un 9,8% del total, mientras que si nos retrotraemos a un año antes –enero de 2015-, las hipotecas se dividían en un 94% a tipo variable y apenas un 6% a tipo fijo.
Algunas entidades, como el Sabadell, apuestan directamente por este cambio de estrategia. Según señaló ayer su consejero delegado, Jaume Guardiola, las hipotecas a tipo fijo suponen ya más del 50% de las nuevas firmas que realiza la entidad, que incluso está ofreciendo esta opción a los clientes que tienen hipotecas a tipo variable.
El banquero, que considera cada vez es una práctica más habitual en España, comentó que las posibilidades para los clientes de conseguir un tipo fijo “tan bajo como el actual, entre el 2 y el 3%, no van a repetirse en el futuro”, cuando vuelvan a subir los tipos de interés.
La semana pasada, el Sabadell decidió rebajar el interés de dos de sus hipotecas, ambas a un tipo de interés fijo, en 0,35 puntos porcentuales. Así, la Hipoteca Fija pasó a aplicar un interés del 2,90% si se asume la vinculación (sino el interés pasa a ser del 3,90%). Mientras que la Hipoteca Expansión se comercializa a un interés del 2,70% con los requisitos máximos y al 3,70% sin contratar ningún producto.
La vinculación que exige la entidad consiste en domiciliar la nómina y contratar un seguro de vida y otro de hogar. Ambas hipotecas tienen un plazo de amortización máximo de 30 años y una financiación del 70% para segunda residencia y del 80% para la vivienda habitual, y se pueden contratar hasta el próximo 15 de abril de 2016.
Entre las ofertas más competitivas del mercado en el mercado de hipotecas a tipo fijo se encuentra también la Hipoteca Fija del Santander, que se puede contratar a un interés nominal del 2,89% a un plazo máximo de 20 años a cambio de vincularse con la entidad. La financiación será por el 80% del valor de tasación o de compra.
La más barata del mercado es la Hipoteca Fija de Bankinter, que puede contratarse a un 1,80% nominal para un plazo de 10 años. A 20 años, el tipo sube a un 2,50% y la entidad ofrece una financiación del 80% para primera vivienda y un 60% para segunda residencia.
