El expresidente José Luis Rodríguez Zapatero ha intervenido en el debate político actual para respaldar al líder del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ante los recientes casos de presunta corrupción en el seno del PSOE.
En una entrevista televisiva, Zapatero ha defendido la legitimidad del Gobierno y ha criticado duramente la actitud de la derecha y la ultraderecha, tanto por su discurso político como por su reacción a los disturbios con tintes xenófobos en Torre Pacheco. Con su habitual tono combativo, el exmandatario ha pedido confianza en la justicia y en las instituciones democráticas.
Zapatero acusa a la derecha de deslegitimar a Sánchez desde el inicio
Durante su intervención en el programa La noche en 24 horas, Zapatero ironizó sobre las críticas que persiguen al actual presidente: “No había nacido Pedro Sánchez y ya pedían su dimisión”, una frase con la que denuncia la constante presión de la oposición desde los inicios de la carrera política del líder socialista.
Según Zapatero, esta legislatura comenzó con una derecha que no aceptó los resultados electorales y que ha mantenido una actitud de rechazo hacia el Gobierno. A su juicio, se le ha exigido a Sánchez “un listón mucho más alto que al resto de presidentes”.
“Pedro Sánchez ha actuado con rapidez, ha comparecido, ha dado explicaciones, ha pedido perdón y ha dejado claro que se hace cargo de la situación”, subrayó Zapatero al referirse al caso del exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, tras el informe de la Unidad Central Operativa (UCO).
Sánchez ha cumplido con sus responsabilidades políticas y el Congreso no le ha retirado la confianza, según Zapatero
“El lenguaje de la ultraderecha es irresponsable y peligroso”
El expresidente también se refirió a los recientes disturbios en Torre Pacheco, en la Región de Murcia, que han estado marcados por brotes de xenofobia y racismo. Para Zapatero, la reacción de algunos líderes políticos, especialmente de la ultraderecha, ha sido “irresponsable” y puede tener consecuencias graves.
“No saben lo que están sembrando”, advirtió, denunciando el uso de un lenguaje incendiario en un contexto social delicado. Aunque calificó los disturbios como un fenómeno minoritario, reconoció que son síntomas de una realidad preocupante.
El exmandatario pidió transformar la crisis en una oportunidad para reforzar los valores democráticos y la convivencia con la población inmigrante
Zapatero insistió en que los momentos más brillantes de cualquier nación son aquellos en los que ha sabido acoger y convivir con los inmigrantes, y advirtió que la xenofobia y el racismo representan lo peor de la condición humana.