Las Universidades públicas madrileñas convocan una huelga el 28 de abril contra la “ley Viciana” de Ayuso

Universidades

Las Universidades públicas madrileñas convocan una huelga el 28 de abril contra la “ley Viciana” de Ayuso

Las redes de profesorado de seis universidades denuncian recortes en la financiación, pérdida de autonomía y una deriva privatizadora en el borrador de la nueva Ley de Enseñanzas Superiores de la Comunidad de Madrid.

Aula de la Universidad Complutense
Aula de la Universidad Complutense
El profesorado de la Universidad Complutense, Autónoma, Carlos III, Politécnica, Alcalá y Rey Juan Carlos ha convocado una jornada de huelga para el próximo lunes 28 de abril, en protesta por la futura Ley de Enseñanzas Superiores, Universidades y Ciencia (LESUC) impulsada por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. La iniciativa denuncia un modelo que promueve la mercantilización del conocimiento, la infrafinanciación crónica y la injerencia política en la autonomía universitaria.. Bajo el lema “Salvemos la educación pública”, miles de docentes, estudiantes y personal universitario están llamados a participar en una manifestación que partirá de Atocha a las 18 horas con destino a la Puerta del Sol. Durante la jornada, los convocantes organizarán piquetes informativos para visibilizar la lucha universitaria y dar a conocer el contenido del polémico borrador de la ley. Según las plataformas universitarias organizadoras, la movilización responde a dos grandes motivos: la asfixia económica que padecen las universidades públicas madrileñas y el "ataque frontal" que representa el anteproyecto legislativo promovido por la Comunidad de Madrid, redactado —denuncian— con total opacidad. Los convocantes alertan de una “redefinición y cierre de grados” según criterios de mercado, así como de una “intervención política y policial” en la vida universitaria Recortes y financiación condicionada: un nuevo modelo Uno de los aspectos más criticados del borrador de la LESUC es el modelo de financiación externa y por objetivos, que limita la aportación autonómica al 70% del gasto universitario. Las universidades deberán obtener el resto mediante fondos de inversión u otros mecanismos financieros, lo que, en opinión de los docentes, incrementa la dependencia del capital privado y promueve la competición entre instituciones. Aunque esta fórmula de financiación por objetivos está recogida en la LOSU, las plataformas señalan que en la futura ley madrileña sustituye la financiación estructural básica, forzando a las universidades a funcionar como empresas en busca de rentabilidad. Autonomía en riesgo y nuevas estructuras controladas El borrador también propone una reestructuración del sistema universitario mediante la creación de un macrodistrito de universidades y formación profesional, difuminando la distinción entre centros públicos y privados, así como entre FP y universidad. Además, se amplía el poder de los Consejos Sociales universitarios, dominados por el sector privado, a quienes se les otorga el control de la ejecución presupuestaria. Se introduce también la figura de un Interventor nombrado por el Gobierno regional, lo que —afirman— pone en jaque la autonomía universitaria. El borrador otorga un peso decisivo al sector empresarial en los órganos universitarios, incluso en la definición de las titulaciones La puerta abierta a la expansión privada Las redes docentes alertan del favorecimiento a universidades privadas, ya que el borrador no establece requisitos académicos mínimos para su creación ni para la adscripción de centros privados a universidades públicas, facilitando así su crecimiento amparadas en el prestigio y recursos del sistema público. Estas facilidades, denuncian, vacían de contenido la universidad como servicio público, al tiempo que se erosionan los valores de justicia social, neutralidad y libertad académica. Llamamiento a una respuesta colectiva La huelga del 28 de abril ha sido comunicada a la Comunidad de Madrid y a los rectorados, y los colectivos convocantes apelan a la unidad de toda la comunidad universitaria, al margen de siglas y filiaciones, frente a lo que consideran un “ataque común”. Desde su perspectiva, solo una respuesta colectiva podrá frenar esta transformación del modelo universitario.

El profesorado de la Universidad Complutense, Autónoma, Carlos III, Politécnica, Alcalá y Rey Juan Carlos ha convocado una jornada de huelga para el próximo lunes 28 de abril, en protesta por la futura Ley de Enseñanzas Superiores, Universidades y Ciencia (LESUC) impulsada por el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso. La iniciativa denuncia un modelo que promueve la mercantilización del conocimiento, la infrafinanciación crónica y la injerencia política en la autonomía universitaria.

Bajo el lema “Salvemos la educación pública”, miles de docentes, estudiantes y personal universitario están llamados a participar en una manifestación que partirá de Atocha a las 18 horas con destino a la Puerta del Sol. Durante la jornada, los convocantes organizarán piquetes informativos para visibilizar la lucha universitaria y dar a conocer el contenido del polémico borrador de la ley.

Según las plataformas universitarias organizadoras, la movilización responde a dos grandes motivos: la asfixia económica que padecen las universidades públicas madrileñas y el «ataque frontal» que representa el anteproyecto legislativo promovido por la Comunidad de Madrid, redactado —denuncian— con total opacidad.

Los convocantes alertan de una “redefinición y cierre de grados” según criterios de mercado, así como de una “intervención política y policial” en la vida universitaria

Recortes y financiación condicionada: un nuevo modelo

Uno de los aspectos más criticados del borrador de la LESUC es el modelo de financiación externa y por objetivos, que limita la aportación autonómica al 70% del gasto universitario. Las universidades deberán obtener el resto mediante fondos de inversión u otros mecanismos financieros, lo que, en opinión de los docentes, incrementa la dependencia del capital privado y promueve la competición entre instituciones.

Aunque esta fórmula de financiación por objetivos está recogida en la LOSU, las plataformas señalan que en la futura ley madrileña sustituye la financiación estructural básica, forzando a las universidades a funcionar como empresas en busca de rentabilidad.

Autonomía en riesgo y nuevas estructuras controladas

El borrador también propone una reestructuración del sistema universitario mediante la creación de un macrodistrito de universidades y formación profesional, difuminando la distinción entre centros públicos y privados, así como entre FP y universidad.

Además, se amplía el poder de los Consejos Sociales universitarios, dominados por el sector privado, a quienes se les otorga el control de la ejecución presupuestaria. Se introduce también la figura de un Interventor nombrado por el Gobierno regional, lo que —afirman— pone en jaque la autonomía universitaria.

El borrador otorga un peso decisivo al sector empresarial en los órganos universitarios, incluso en la definición de las titulaciones

La puerta abierta a la expansión privada

Las redes docentes alertan del favorecimiento a universidades privadas, ya que el borrador no establece requisitos académicos mínimos para su creación ni para la adscripción de centros privados a universidades públicas, facilitando así su crecimiento amparadas en el prestigio y recursos del sistema público.

Estas facilidades, denuncian, vacían de contenido la universidad como servicio público, al tiempo que se erosionan los valores de justicia social, neutralidad y libertad académica.

Llamamiento a una respuesta colectiva

La huelga del 28 de abril ha sido comunicada a la Comunidad de Madrid y a los rectorados, y los colectivos convocantes apelan a la unidad de toda la comunidad universitaria, al margen de siglas y filiaciones, frente a lo que consideran un “ataque común”. Desde su perspectiva, solo una respuesta colectiva podrá frenar esta transformación del modelo universitario.

Más información

Los datos del último sondeo de Ipsos para La Vanguardia, realizado entre el 15 y el 21 de mayo, confirman un cambio en el…
España afronta un “SOS” habitacional, según la ministra de Vivienda, por el desvío de la oferta hacia el alquiler turístico y la falta de…
El ciberespacio se ha convertido en un terreno hostil, donde convergen intereses de Estados y ciberdelincuentes, según refleja el informe anual de Seguridad Nacional….