La Unión de Profesionales Trabajadores Autónomos (UPTA) ha planteado que la nueva Ley de Autónomos que se está tramitando en el Congreso contemple que los gastos de comida diaria justificados con vales o cheques de comida puedan ser deducibles en la misma cuantía y condición como lo es para los trabajadores asalariados. La propuesta, según UPTA, ha sido recogida en dos enmiendas presentadas por Compromís y Esquerra.
El objetivo, según explica esta asociación en una nota, es igualar las condiciones entre los autónomos personas físicas y los societarios, que sí que pueden deducir estos gastos como propios de la sociedad, “lo que no resulta comprensible y es claramente discriminatorio”.
El secretario general de UPTA, Eduardo Abad, hace notar que “resulta completamente inadmisible que aun estemos en esta situación los que no somos o estamos con una forma jurídica como societarios”.
Abad destaca que la propuesta además sería perfectamente factible si para ello se utilizan mecanismos que ya existen en la actualidad y que después de años de bagaje han demostrado ser eficaces y fáciles de usar.
Además, asegura, no perjudica la recaudación de la administración puesto que no sólo su efecto directo es poco sensible sino que además ayudaría a un mayor crecimiento, especialmente en el sector de la hostelería urbana y de zonas industriales, que es la que menos se beneficia del tirón del turismo.
El sistema de cheques o de tarjetas finalistas para la comida deja el rastro exacto de la trazabilidad de la utilización, evitando la picaresca en los gastos que pueden deducirse legalmente, con un gasto de 9 euros máximo.
Esta situación, según UPTA, es especialmente preocupante para miles de autónomos que se entiende están en situación de agravio con respecto al resto de operadores económicos.
Hace unos días, el presidente de la Federación de Autónomos ATA, Lorenzo Amor, mostraba su confianza en que la esperada ley de reformas urgentes del trabajo autónomo esté aprobada antes de finales de junio.
